jueves, 5 de septiembre de 2024

ENTRE COMEGORGOJOS Y ALIENÍGENAS (FICCIÓN POLÍTICA)

Había una vez un país asediado por incontables desaprobaciones y envidias de muchos otros. Este país, inmensamente rico al grado que las excretas de sus habitantes se transformaban en oro después varias horas expuestas al sol, se granjeó mortificantes enemistades por negarse a regalar su riqueza. En un mundo globalizado, con dueños y lacayos por doquier, ese país se había inventado que sus bendiciones y dones eran suyos y de nadie más, y que, para acceder a su posesión, era menester pagarlos o intercambiarlos por otros bienes.

Tales condiciones, fortuna y tan odioso gentilicio, derivaron en una mesa de guerra, donde los poderosos le recitaron que el mundo tenía dueños, que estos eran el motor de las cosas creadas y que, en consecuencia, todos debían cooperar ofreciendo sus dotes para el cabal funcionamiento. Es decir, en términos políticos y económicos aproximativos, que la sociedad humana era de naturaleza capitalista y que su riqueza se obtenía de modo comunista.

Los líderes de aquel singular país respondieron “¡No!”, que no podían creer que los demás se creyeran el cuento y que sus tierras y sus tesoros les pertenecían. Que no era imaginable que no pudiesen existir otras maneras, dignidades... De inmediato se suscitó la guerra, en la que participaron hasta sus vecinos, otrora “amigos”.

Al principio la guerra se desarrolló silenciosamente, mientras los enemigos desde afueran maquinaban el despojo sin violentar notablemente las apariencias. Porque el mundo era una sinergia donde todos daban sin chistar y se doblaban con aquiescencia. ¡Y aquel país, podrido en riquezas ─mascullaban los presuntos amos─, valía cualquier cautela! Calculadoramente, como doctrina de shock para su población, decidieron repudiar aquella su riqueza, no aceptándola en ningún mercado o sistema financiero, obstruyéndola, maldiciéndola, hasta que aquel opulento pueblo explotara de pobreza.

Puesta la rueda a rodar, los habitantes de aquella tierra fueron odiados por amigos y enemigos.  Sus vecinos, países hermanos, hinchados en sus rodillas, no podían digerir semejante discurso de independencia. “Afean la región”, declararon, “recordándole al progreso primitivas eras”. Entonces los odiaron con más fuerza, mancomunadamente, y llegaron al extremo de cazarlos cuando se salían de sus fronteras para esclavizarlos o devorarlos, y así tratar de comprender tan peculiar gentilicio.

Como a un secuestrador cuando se hace con sus rehenes, lo cercaron cortándole la electricidad, el suministro de agua, de alimentos… ¡Y no es que aquel país hubiera tenido necesidad de tales cosas desde afuera, dado que las poseía en abundancia, sino que el enemigo penetró a su interior y estropeó sus cauces, maquinarías e inteligencias de surtimiento! A la táctica la denominaron sanciones; a la estrategia, libertad.

Así trascurrieron décadas hasta que lograron quebrantar la unidad de su pueblo, dividiéndolo en nacionalistas y alienígenas, traidores estos para los primeros y rastreros esclavos aquellos para los segundos. El enemigo externo, mediante la siembra del sabotaje y el terror, finalmente había cosechado uno a su semejanza, pero interno, proveyéndolo hasta de una doctrina: el mundo es una aldea, los países son bosques con recursos, no hay individualidades, el libre albedrío es relativo, el poderoso te alimenta y la riqueza de nada sirve si nadie te la compra.

Sin embargo, los habitantes de aquella extraña nación hacían gala de gran cultura, se conocían grandes teorías políticas de convivencia y hasta deletreaban el cuento del contrato social de Juan Jacobo Rousseau. Junto a sus líderes, demandaron la protección de su Estado. Y así fue como se proveyó a cada familia del país del pan y el agua, entregados en las puertas de los hogares, incluyendo a los alienígenas mismos.

Pero he aquí donde entraron en combate los extranjeristas. Recibían los alimentos, los consumían, pero después los satanizaban, denigrando de su calidad, exponiendo que contenían alimañas, especialmente gorgojos, esos animalillos del pan y las harinas… Coleópteros, como sus consumidores.

Y fue cuando se suscitó la inevitable guerra civil, tan soñada desde afuera, silenciosa ella, de cuarta generación, aquella que se da sin el cruce del sable entre la carne ni la ballesta. Entonces se decantaron los términos: los comegorgojos, bichos de la tierra, pasaron a ser llamados patriotas, y traidores los afueristas. Y fue así cómo se dividieron el país, su modalidad política y sus recursos: los primeros, autonomistas, como mayoría se proclamaron dueños de las riquezas de sus tierras, legislándola para la subsistencia propia; los segundos, extranjerizantes, como minoría poderosa exportaron sus heces, soñando con diluirse algún día en la libertad del mundo entero.

Los comegorgojos morían por borrar la vergüenza de que hubiera nativos que vivieran de su humanidad misma, vendiendo sus viscerales excretas; y los extraterrestres perdían el sueño por apoderarse completamente de la opulencia patria, aniquilar tan horripilantes insectos y poder así ofrecer íntegramente su tributo a la omnipotencia del cosmos.


lunes, 26 de agosto de 2024

LOS PROBLEMILLAS DE EDMUNDO: NI FUE, NI IRÁ

Lunes, 1:30 pm. Edmundo debió comparecer hoy ante la Fiscalía General de la República para responder por las acusaciones de "usurpación de funciones, forzamiento de documento público, instigación a la desobediencia de las leyes, delitos informáticos, asociación para delinquir y conspiración" [https://www.vtv.gob.ve/ministerio-publico-emite-nueva-citacion-edmundo-gonzalez/].
No asistió. El Ministerio público anunció que lo volvió a citar para el día siguiente, martes, 27 de agosto, a las 10:00 PM. Y, por las lógicas que soplan, no asistirá. Argumenta que no hay "garantías de independencia" por parte del organismo público y acusa que la fiscalía precalificó sus presuntos delitos.
No irá. Edmundo González no es libre de tomar decisiones. Alcanzó un nivel político como el de un presidente o diputado, que no se debe a sí mismo sino al compromiso con la causa que le comprometió responsabilidad y funciones. Entonces lo personal es una dimensión que debe sopesar para hacerla prevalecer sobre lo político. Un cualquiera que sea arrestado en la calle es una criatura unidimensional: es su persona natural ante la figura cultural del Estado, esto es, contrato social en ejercicio básico.
Pero Edmundo no es diputado, mucho menos presidente. Fue candidato presidencial, a la postre derrotado. Ergo no es nada más que Edmundo González, un ciudadano con deberes y derechos. Eso sí, no es común y corriente, como dice el dicho, pues fue catapultado como figura pública en virtud de su candidatura presidencial, como un cantante o mago. De manera que el ejercicio de sus deberes y derechos en lo sucesivo habrá de ser un hecho inevitablemente notable, con brillo de estrella.
No obstante, la fama no tendría que eximir a nadie de culpabilidades. En una situación ideal de sociedad, él tendría que haber asistido a su cita. Mas Edmundo considera que la historia no ha terminado. Persiste en que es presidente, como lo proclamó María Corina Machado con base en una base de datos, apoyada por la UE, la OEA, los EE. UU. y el Grupo de Lima 2.0, complotados eternos contra Venezuela.
Ese nivel de compromiso, aceptado al decidir ser el candidato "avatar" de María Corina Machado, lo hace mentir, cumplir su trabajo de engranaje en el juego, aunque no quiera o no pueda escapar. Alea iacta est, cruzó el río Orinoco y, aunque puedan acuciarlo deseos de retorno, no le queda más que avanzar para salvar su vida, lejos de la terrible corriente. Equivale a decir que Edmundo no controla los eventos, ni siquiera su vida personal. Como la corriente del Orinoco indomable, debe proseguir con la trama.
Se dice que nunca se entregó del todo a la candidatura presidencial. Mostró renuencia a estar trotando a su edad por esos lares soleados y polvorientos del país. Lucía casi siempre descolocado sobre las tarimas de la oratoria, como obligado. Menos habría querido estar inmerso en el paquete de problemas que ahora se le avecina. Pero se le presentó una propuesta de compromiso, la cual él aceptó, como diría el general Lucas Rincón de Hugo Chávez.
Ahora es tarde para marchar de regreso. OEA, UE, EE. UU., Chile, Uruguay, Paraguay, Ecuador, Perú, Argentina, Panamá, República Dominicana, Costa Rica (Grupo de Lima 2.0) e, inclusive, Colombia y Brasil, le recuerdan el compromiso. Cruzó el río Rubicón. El algoritmo se debe ejecutar contra la patria de Bolívar: presidente paralelo (tipo Juan Guidó), una Venezuela denigrada en su institucionalidad, una perspectiva eterna de invasión para expoliar sus riquezas naturales, un Esequibo robado por las transnacionales, un Estado forajido, un país quebrado, una nación vituperada en cada rincón de la tierra probablemente hasta por tener más reinas de bellezas que cualquier otro país en el planeta, reinas que a la final  no eran tales, sino horribles y tramposas mujeres procedentes de Venezuela.
Lo peor para Edmundo, desde el momento en que actúa como testaferro político, es que tendrá que pagar por los delitos cometidos por la proscrita María Corina Machado: muertos en las calles debido a crímenes de odio, montaje de un software electoral paralelo, traición a la patria. Lo que ella hizo o haga lo tendrá a él como testaférrico escudo.
La pregunta es: ¿se esperó Edmundo González semejante evolución de los hechos? Las premisas legales y políticas, bajo lógica indetenible, concluirán en una orden de detención en su contra. Se especula que puede tener fuelle para afrontar debido a unas acciones de delación y violatorias de los derechos humanos que acometió en Centroamérica en el pasado; que es posible que esté familiarizado con su suerte de forajido. Sin embargo, eso no quita razonamiento al hecho futuro de que será una persona de edad avanzada estropeada en sus sueños de amor filial arraigados en Venezuela, su patria. A menos que también esto sea una pendejada romántica dentro de sus consideraciones, y su ambición sea obtener la ciudadanía estadounidense, vivir por allá, como ha ocurrido con todas las herramientas humanas protegidas por los EE. UU.

viernes, 23 de agosto de 2024

LOS EXCANDIDATOS EN PRIVADO [FICCIÓN POLÍTICA]

El candidato, agobiado por la presión política, se desbarató en llanto.
─¡No puedo más! ─gimió lastimeramente─. ¡Tengo familia y, con esta derrota, que tú le llamas triunfo, lo que he ganado es perder la paz y que me persigan esos miserables chavistas por todas partes! ¡Nooo…! ¡Perdí el país, la tranquilidad para caminar por mi plaza, comer al aire libre…! ¡Saludar…! ¡Ver los pájaros…! ¡Desterrado…! ¡Sniff! ¡Nunca, nunca debí aceptarte nada!
La candidata, mucho más joven, lo asió por el antebrazo y lo retrajo hacia sí, procurando despegar su cabeza del marco de la ventana. Su rostro también expresaba cansancio, pero jamás perdía su sesgo displicente.
─¡Párate, párate, chico! ¡Deja eso! ¡Sé hombre, señor! ─le dijo dirigiéndole al mismo tiempo una orden a su asistente con la mirada─. ¡Levántalo, ponlo por allá, tráele agua o un trago que le guste! ¡Sírvenos tequila!
Pero el candidato, flojo como un muñeco, nunca tensó su cuerpo y se dejó derrumbar sobre el sofá. Mantenía los ojos cerrados y gimoteaba con convulsivos movimientos de pecho. Entonces la candidata cambió de estrategia. Se acercó maternal, con dulzura, y peinó hacia atrás sus blanquecinos cabellos.
─Tranquilo, corazón. Estarás bien. Se entiende que vivimos un capítulo durísimo con estos chavistas basuras, pero venceremos. Verás… ¿De que te preocupas? Tu familia y mis hijos están en el exterior, a buen resguardo. Si alguien muere en este relajo, no serán los nuestros. Eso está arreglado. Trata de serenarte, aguanta un poco más. Verás cómo desvirtuamos ese triunfo del chavismo. Tenemos la fuerza del mundo con nosotros; tenemos al norte, a Europa. ¿Por qué te pones así? Fíjate que ahora tienes mucho dinero, padre, además de que pasaste a la historia de este país y, como una eminencia, podrás pasearte en esos países del primer mundo que nos apoyan. Ya verás cómo aislaremos a Venezuela. Mira, yo tengo rato ya trabajando para esto que vivimos y, si aguantas, verás una gran recompensa para ti. Formaremos otro grupo de Lima, pera esta vez en Chile, con Paraguay, Uruguay, Colombia, Brasil, Perú, y muchos más.  ¿No te da confianza eso? No estamos solos. Siempre podremos retirarnos para donde queramos con tantos aliados. Míralo así: tu serás presidente de este país, reconocido por medio mundo, y no tendrás que desgastarte con nadie porque yo me encargaré de esas movidas. ¿Sí, sí…? ─en ese ínterin se acercó el asistente y la candidata tomó de sus manos sendas copas de licor─. ¡Ven, bebe, trata de levantarte un poco!
Entonces el candidato se irguió levemente sobre su asiento, colocando uno de sus brazos sobre el descanso del mueble, aceptando un sorbo del licor de la mano de la candidata. A su peculiar modo, como por brinquitos, posó varias veces su mirada en el rostro de su compañera política, sorprendido por tanta andanada de cariños procedentes de su persona.
─Está bien, amiga mía ─resopló─. Excúsame. Soy viejo ya y no tengo esa reciedumbre de tu juventud. Quisiera complacerte, llevarte el paso… Tu tienes pasión, carisma... En verdad te admiro, caramba, en especial por esa habilidad de convertir una derrota en victoria, incluso contra el TSJ y el país entero… ¡Es grande! ─exclamó el candidato con rostro ingenuo, como buscando valor en sus palabras para recuperarse─. ¡Y esos amigos que tienes, los más poderosos del mundo…! Pero…
─Pero… ¿qué, señor…? ─preguntó estropeadamente la candidata, agarrando de pronto la cabeza del candidato, quien se derrumbó de nuevo sobre el sofá, bañado por el licor y las copas.
─¡Yo lo que quiero es comerme una buena empanada con picante en cualquier lugar sin que nadie me vea con ojos torcidos! ─berreó otra vez el candidato, sollozante─. ¡¿No puedes entender eso…?!
Y la candidata, en efecto, como lo describió el candidato, torció los ojos hacia el cielo en medio de un infinito gesto de fastidio.
 
 

miércoles, 21 de agosto de 2024

¿ES POSIBLE? SE HA REGISTRADO UN CAMBIO DE COMPORTAMIENTO EN EL OPOSITOR VENEZOLANO

Es un hecho meridiano que la oposición política venezolana está derrotada, con actas o sin actas. Derrotada hasta de antemano en tanto participó en las elecciones presidenciales no precisamente para ganar en buena lid, sino para desconocer al seguro ganador. Y esto como primer paso para precipitar una serie de acciones (especialmente foráneas) que la pudieran conducir al poder.
La oposición, encabezada en esta oportunidad por la proscrita política María Corina Machado, se comportó como siempre lo ha hecho desde que fue desplazada del poder por Hugo Chávez, hace casi ya tres décadas. No le importó para nada conservar las apariencias y echó mano de bajezas para competir, como intentar llevar a las masas a mortales confrontaciones, promover la traición, utilizar niños para sus fines espectaculares, implorar la invasión y el golpe de Estado, y jugar al ventajismo de sus líderes, que envían a la refriega a los tontos mientras ellos aseguran a sus hijos en el extranjero.
Pero para este capítulo último de la historia hubo una distinción, registrada no precisamente entre sus filas, sino a partir del bando opuesto, el gubernamental. Hay primero que decir que ella fue lo mismo de siempre: desconocimiento, llamado a la violencia, traición patria, desestabilización, etc., por lo menos hasta el 29 de julio, un día después de las elecciones, cuando medio incendiaron el país con sus acciones de fuerza.
Esa distinción (motorizada desde lo opuesto) la afectó rotundamente, al grado que parece haber recibido un golpe de muerte en su esquema consabido de la violencia, llamado al odio y la invasión, según los últimos eventos ocurridos con la famosa y malograda marcha "mundial" convocada para el sábado 17 de agosto del mes corriente. Al grado que puede alguien hablar de un cambio o parálisis entre sus adeptos, lo cual no deja de sonar tragicómico en una gente que jura luchar por un cambio en los demás y no en ellos mismos.
Y no deja de parecer loable que ese 40% electoral opositor del país experimente una muda cualquiera en su comportamiento político, expresada en su renuencia última a seguir con el esquema de la violencia, según lo observado a partir de la convocatoria mencionada.
En fin, esta acción gubernamental que podría estar incidiendo en un cambio de esquema opositor es la siguiente:
  1. Luego de años de asedio, el gobierno finalmente se preparó para repeler las consabidas acciones violenta de calle del sector opositor aplicando los rigores de la Ley Constitucional contra el Odio, por la Convivencia Pacífica y la Tolerancia;
  2. Dicha ley también hizo su efecto en lo concerniente a las expresiones de odio a través de las redes sociales;
  3.  La llamada Operación Tun Tun hizo su mella en el ánimo extremista, sembrando escarmiento a través de las mismas redes sociales utilizadas para llamar a la violencia y el odio;
  4. El llamado del diputado Diosdado Cabello para purgar de traidores la administración pública y radicalizar la revolución tuvo su efecto. Una revolución no puede hacerse con traidores al frente. Reculó un gentío para cuidar sus "puestos";
  5. La latente amenaza de revisar en cualquier momento los beneficios y bonificaciones sociales asignados a los que llaman a la violencia y a ir contra el "régimen";
  6. La reciente aprobación de la ley regulatoria de las ONG, que impediría el financiamiento sospechoso desde instancias foráneas.
  7. La actual discusión para su aprobación de una ley contra el fascismo
  8. La discusión en marcha sobre la medida penal de condena perpetua

lunes, 19 de agosto de 2024

EL RATÓN MORAL DEL DÍA DESPUÉS EN LA VIDA DE MARÍA CORINA MACHADO

En política, los lunes podrían ser equivalentes al momento que se describe en la expresión "el día después", según el balance de los resultados de la semana transcurrida, todo él impregnado de mortificación moral si la vaina fue un fracaso o de celebración si fue un éxito.
Nadie mejor que los borrachos para hablar de la primera categoría. En Venezuela se describe como "ratón moral" al sentimiento espantoso de ese día cuando en el anterior el beodo golpea a su padre, tira el mantel de la mesa del cumpleaños de su hijo y aplasta la torta con el pie contra el piso.
En cambio, la sensación de triunfo que se experimente, por ejemplo, un lunes porque una ciudad reinicie sus ciclos de vida con normalidad tendría que ser universal si es que en los días pasado hubo una anomalía. Y es tanto más triunfo si la tal anomalía consistió específicamente en ser alguna propuesta de acabose político contra la cotidianidad citadina.
En política la normalidad de un país o ciudad siempre será un triunfo. Así se expresa la aceptación ciudadana respecto de su regularidad política.  Y se dirá que "la vida sigue" cuando acaezca la incidencia de algún asunto perturbador, a la final insignificante, fortaleciéndose el acorazamiento o inmunidad del formato ciudadano contra tentativas de cambio.
Los lunes, pues, son días de balance y de recoger bártulos. En ese día fundamental de la vida civilizada mucho es el que se lanza desde un quinto piso, se va del país o se declara subversivo. Todo dependerá de la cosecha de lo que cultivó o propuso en los días pasados.
El sábado 17 del mes corriente, María Corina Machado propuso una marcha "mundial" contra Venezuela para pedir a su presidente que renuncie y entregue el mando a Sr. Edmundo González, en su opinión el ganador de las elecciones presidencias del 28 de julio. Su propósito fue forzar de algún modo la deposición presidencial con masiva presencia de venezolanos en las calles, replicando las acciones con los emigrantes en el exterior y exaltándolas con la fanfarria de los medios de comunicación afectos. Erosionar, por lo menos, la legitimidad popular del presidente, procurando expresiones de apoyo del sector militar, dando voz y cobertura a la complotada conspiración imperial contra Venezuela (EE. UU., UE, Perú, Brasil, Colombia, Ecuador, Panamá, Uruguay, Paraguay, Chile y Argentina).
Pero no ocurrió nada. La semana amaneció con su lunes rozagante, sin salpicaduras en el vestido, lista para seguir con su corriente vida citadina. Medio mundo laborando, medio mundo en casa o campo, ejercitándose o negociando, muchos regresando de la playa.
Es la realidad y, al mismo tiempo, el problema para quien pretendió cambiarla. La susodicha convocatoria mundial no reunió ni 15 mil adeptos en su punto álgido de concentración en Caracas, lo cual es un duro fracaso si se contrasta con las 80 mil personas que improvisó la convocatoria presidencial en las adyacencias palaciegas. Dramática jugada del destino.
Por lo dicho, el lunes es también un día de muerte política. De esta guisa, el cadáver de María Corina puede ser lastimosamente contemplado en una horqueta de la plaza Bolívar de Caracas.

sábado, 17 de agosto de 2024

MI DELIRIO SOBRE VENEZUELA

Hoy podría estar usted tranquilo en su casa, atendiendo a sus animales, plantas o seres amados mientras el mundo sigue su ritmo en general travieso. Tendrá esa sensación sobre su cabeza: el mundo avanza con su infinidad de problemas y diversidad. Y rápidamente en su mente, culta o no, atravesarán montones de ideas, básicas o complejas: ¿cómo será eso de creer en otro dios? ¿cuántos hay? ¿cómo se las arregla la gente en Haití sin comida? ¿cómo será el estado emocional de un ucraniano obligado a marchar al frente contra los rusos, a una muerte segura, apuntado por los fusiles de sus coterráneos para que no deserte?
Pero no, no es posible. Usted no podrá estar tranquilo. Tendrá la inmediata conciencia de que está en Venezuela (o en cualquier otro lugar) y se dirá, filosóficamente, "me toca la tajada respectiva de la preocupación mundial". Cada uno, cada lugar, cada cual con sus líos. Podrá, incluso, pensar en la posibilidad de no tenerlos, de desearlo arduamente para proseguir con su café con arepas rellenas de pollo guisado, pero su mente se averiará buscando respuestas e, ineludiblemente, terminará pensando en ascetas perdidos en las cavidades del Himalaya.
Especialmente en Venezuela, se dirá, sí, estará en Venezuela.
─Nuestro país no es tan simple como otros ─meditará con su esposa─. Tiene riquezas, todos lo quieren y, en verdad, parece ser de todos porque todos en el planeta hablan de cómo debe ser o comportarse.
Su esposa, una persona amante de la paz como usted, se moverá silenciosamente por la casa conspirando sobre cómo vivir un día más sin preocupaciones deleznables.
─Es nuestro problema, nuestra realidad ─tarde o temprano soltará─, al peculiar estilo que le está tocando vivir al país, así como les toca a otros resolver sus vainas a su manera en otros lares.
Y usted continuará con su cabeza filósofa observando el panorama, posiblemente murmurando que, por lo menos, usted tiene arepas con leche que comer, a diferencia, por ejemplo, de un niño haitiano que se las hace con la tierra que desconcha de las paredes de su casa. Y se meterá por allá en la cocina a hacer ruidos con las ollas y recipientes diversos, queriendo como acallar lo que parece resonar triunfal entre sus neuronas: este mundo es una preocupación perpetua. No hay escapatoria. Lo habitan problemas mayores o menores que otros, según el sitio donde te coloque la providencia para resolverlos.
Venezuela. Sí, usted pronunciará ese nombre y, docto o no, un millón de ideas recorrerán su organismo en sinapsis: Bolívar sacrificado (eso lo sabe todo el mundo), luego su esfuerzo mancillado por largas disputas, luego tutorado por ambiciosas potencias, después, nuevamente, estremecido por su origen bolivariano (de este despertar saben todos), y ahora, como si la historia se repitiese, luchado otra vez por su independencia.
A estás alturas posiblemente usted esté caminando por el patio, buscando alivio entre la contemplación de sus apacibles animales. Y echará mano, ahora sí, de su brillante ingenio y vasta cultura para adivinar el firmamento entre las copas de los árboles. Reflexionará que el país es peculiar, sí, que tiene algo indestructible que ha impedido su toma por los ingentes poderes que lo acosan, que lo sueñan sometido y abierto como un cofre de riquezas de cara al cielo.
Pensará en las múltiples revoluciones de colores que en el mundo han sido para deponer gobiernos, en primaveras, manuales…; pensará en traidores internos (malinches o cipayos), golpes de Estado…, y se imaginará al país como un fugitivo que huye por el mundo ocultándose para proteger el porte de sus tesoros, sus secretos, tal vez su divina condición o procedencia.
Sí, peculiar, se repetirá. Su país tiene que ser una fortaleza de alguna manera para evitar hasta ahora que lo hayan invadido con ese desmesurado bagaje de riquezas que posee. Y más o menos así concluirá su incursión mental respecto de los problemas del mundo y Venezuela: en el mundo hay un pulso de poderes que alinea intereses y apoyos confrontados, su paz es frágil y, por tal razón, en la disputa de los poderes, se cultiva un equilibrio; en medio de tan delicado equilibrio, que una de las partes tome a Venezuela con el botín de sus recursos naturales y aspectos geoestratégicos, rompería la vidriera de la paz y, ¡pum!, acaecería la guerra. La toma de Venezuela es un ventajismo para quien lo acometa.
Después de semejante decantamiento, nada nuevo, por cierto, porque es una conclusión a la que llega a diario, usted probablemente vuelva al interior de su casa (al lado de la apacibilidad amorosa de su esposa e hijos), vea la televisión, consulte el INTERNET o eche un vistazo al celular. Se enterará que, en efecto, hay una convocatoria a marchar para solicitar la renuncia del gobierno y hacer que, finalmente, el país se rinda, se ponga en cuclillas y entregue la alforja de sus riquezas a quienes la sueñan desde hace tiempo para someter al universo.
─¡El país en ruinas, en posesión de otros, sumido en la mortandad del hermano contra el hermano! ─exclamará resignado, cansado de la especulación de sus infatigables pensamientos.
Saldrá a la calle y realizará sus diligencias consuetudinarias, afrontará el mundo, los cielos, la gente, sabiendo que al día siguiente se reiniciará la historia de la humanidad en su cabeza.

viernes, 16 de agosto de 2024

RADICALIZACIÓN Y PENA DE MUERTE PARA REINICIAR EL RUMBO

La elección de María Corina Machado (MCM) como presidenta encargada de Venezuela es un asunto de agenda en la política estadounidense. El descarte de Edmundo González para ese rol es una cuestión de trámite dado que, en primer lugar, él ha manifestado poca voluntariedad para asumir tan explosiva tarea por su edad y, en segundo lugar, producto de lo anterior y de la conveniencia del Departamento de Estado, se le propondrá su inhibición en favor de la damisela.
Una vez investida MCM, quien para los efectos invasivos de los EE. UU. no está inhabilitada, su figura suplirá el vacío dejado por Juan Guaidó y "legitimará" el inconcluso remate de la petrolera venezolana Citgo en ese país y el saqueo de lo que queda del oro venezolano en Inglaterra. Citgo estuvo a punto de ser despedazada hace poco, pero, para tapar el descaro de robarse sus activos sin una representación del gobierno venezolano presente, un tribunal gringo acaba de extender una prórroga, esperándose con ansiedad por MCM como tapujo para refrendar.
Como quiera que se le dé vuelta a este brutal esquema de saqueo imperial, en nada diferenciado del asalto de un corsario en aguas marinas del siglo XVIII, la persistencia del despojo continuará mientras algo aprovechable quede de Citgo en Houston y del oro en Londres. La existencia de la figura de un presidente venezolano encargado es hartamente requerida para proceder con las acciones debido a que la rapiña sólo se justificará con la narrativa de que se le entregan los dineros a MCM y su tren ministerial para cubrir el gasto de sus asuntos de Estado: apoyos humanitarios, sueldos, giras, marchas, convocatorias, prensa, etc.
No hay fuerza humana, política o legal que impida semejante cometido del país del norte y sus aliados contra la patria de Bolívar. No se requirió de nada para aceptar a un Guaidó autoproclamado e iniciar el saqueo, acometiendo lo que se le vino en gana; y no se precisará del visto bueno de ninguna institucionalidad mundial para continuarlo debido a que quien opera contra Venezuela es la eximia potencia militar que, desde 1776, ha realizado 400 intervenciones en el mundo sin cortapisas de nadie (https://misionverdad.com/eeuu-ha-lanzado-casi-400-intervenciones-militares-en-todo-el-mundo), llámese ONU o cortes internacionales de justicia.
En consecuencia, el panorama político inmediato para Venezuela después de sus elecciones se presenta sin variación: un presidente encargado, unos objetos para saqueos (Citgo y el oro) y una funesta intencionalidad de invasión como constante en proporción al tamaño de la riqueza mineral del país suramericano (la mayor reserva de hidrocarburos del planeta). Suma así el país dos despojos descarados, seculares: el territorio Esequibo por Inglaterra y los EE. UU. en el siglo XX, y unos grandes activos petroleros y oro en el siglo XXI, nuevamente por Inglaterra y los EE. UU. La guinda de la historia ahora sería la explotación de las riquezas esequibas.
En semejante contexto de fuerza impuesto por los poderosos, probado ya que mediante el diálogo o la diplomacia igualmente ha tocado históricamente perder, a Venezuela le queda la opción de considerar el endurecimiento guerrero de su posición nacionalista y soberana frente al opresor, y hacer valer su basamento interno como defensa autonómica, como le ha tocado hacer a países como Corea, Irán, China, Cuba, entre otros. Ello, como radicalización, tendría una expresión concreta sobre la realidad política: detención de Henrique Capriles, Edmundo González, María Corina Machado (los que están al alcance) y la confiscación de bienes y propiedades para resarcir el robo promovido contra la nación desde el exterior, y conjurar el aura de impunidad y disfuncionalidad de estatal. La consideración de la enmienda constitucional para permear penas severas como la prisión de por vida y la pena de muerte tendría que empezar a lucir como el inicio de un paso crítico para transitar una senda igualmente crítica, pero con horizontes de independencia auténtica, en un sentido bolivariano.

jueves, 15 de agosto de 2024

LA MARCHA INTERGALÁCTICA DEL SÁBADO 17 DE AGOSTO 2024

María Corina Machado (MCM) convocó a una marcha "mundial" el sábado 17 de agosto para protestar contra la fraudulencia electoral de Nicolás Maduro. Así lo manifiesta en su convocatoria: "vamos a tomar las calles de Venezuela y el mundo" para cantar victoria (https://www.infobae.com/venezuela/2024/08/11/maria-corina-machado-convoco-a-nuevas-movilizaciones-para-el-17-de-agosto/).
Normalmente las convocatorias y marchas tienen lugar en los puntos álgidos de un reclamo determinado. Por ejemplo, si el reclamo es una mejora de las condiciones laborales y un aumento de sueldo, es esperable que los trabajadores rodeen la sede jefatural de su empresa y, como presión, se declaren en huelga. Si se trata de un reclamo electoral, como es el caso, es factible que el candidato defraudado asista con sus adeptos a los entes de conteo del voto.
Pero en el caso de MCM, su convocatoria trasciende al llamado de una marcha de grado local (en el ejemplo, los trabajadores) o nacional (elecciones) y la proyecta como una manifestación de tercer tipo, internacional, como suele realizarse cuando ocurre una calamidad de alcance mundial cuando las capacidades humanas no son suficientes para remediar e impera el sentimiento de la injusticia y la impotencia, sea contra el hombre mismo o la naturaleza desbocada. Ejemplos sobran: Guerra de Vietnam, masacre de palestinos, invasión de Irak, invasión de Panamá, bombardeo nuclear, inundaciones o pestes.
En tales circunstancias no es raro que se realicen llamados puntuales para orar o mostrar un rechazo generalizado, global.
Si es el caso, por ejemplo, que Israel y los EE. UU. están masacrando a los palestinos y no existe ninguna fuerza humana o institucional para detenerlos, no queda más que, por lo menos, en medio de la impotencia y la tristeza, expresar el rechazo del mundo ante tal acto.
MCM, que no es ni siquiera la demandante afectada por ser una política inhabilitada en Venezuela, coloca un hecho de tipo nacional como si fuese una calamidad o tragedia de repercusión mundial (¡ay de la hambruna! ¡hay del genocidio!), llamando al exterior a deshacer entuertos internos, desdeñando instancias o institucionalidades propias para ejercer sus reclamos. Elecciones van y vienen todos los años en una globalidad de casi 200 países, pareciendo presuntuoso ─si no loco─ pretender que terceros remedien peculiaridades cuando existe jurisprudencia vernácula para resolver. Corresponde con este perfil su negativa como ente político (detrás de Edmundo González) a comparecer ante el Tribunal Supremo de Justicia para dilucidar el asunto de las actas que ella tanto impugna.
Claros en que no le importa la legislación nacional de su país, su cometido es, consecuentemente, buscar la sanción de entidades internacionales como la OEA (a la cual Venezuela no pertenece), los EEUU (que siempre ha soñado con invadir y robar la riqueza de la patria de Bolívar), la ONU (que es un mecanismo vetusto al servicio de intereses imperialistas), la UE (que son una pila de países históricamente corsaria y colonialista) y las múltiples cortes internacionales de justicias (CPI, CIJ, etc.), organizaciones de naturaleza veleidosa que, históricamente, jamás han fallado en favor de causas que requieran una real acción defensora y que no comulguen con el despojo y la rapiña. La genética constitucional de estas últimas figuras se enraza con el porte y acto de esas organizaciones que, espectacularmente, han arrebatado territorialidades, nacionalidades y riquezas a terceros.
Y Venezuela, en efecto, fue un país tercerizado cuando lo despojaron del Esequibo, le robaron los banqueros ingleses sus toneladas de oro y le cogieron los gringos su empresa petrolera Citgo. ¡Vaya pena!
A no ser que busque tercerizar la elección de un presidente en su país, es decir, que otros desde afuera elijan quién gobernará a Venezuela y se cuenten sus votos en una mesa de revisión internacional (despreciando lo propio), la convocatoria "mundial" de MCM no tiene sentido, como sentido internacional sí tendría, por ejemplo, reclamarle al gringo el asesinato sionista de palestinos o sus acciones criminales del pasado contra la nación nipona, imprescriptibilidad inolvidable.
Se trata de una mecánica confabulada para orillar a Venezuela en la ilegitimidad e ilegalidad, y, convenientemente, declararla país forajido, y así obstruirla en su crecimiento y fortalecimiento para, finalmente, jugar con la idea de apoderarse de ella algún día. Para estos fines, no es nada difícil proclamar en una isla cualquiera que Edmundo González es su presidente o que MCM es la delegada estadounidense para los asuntos de Venezuela, teniendo en mientes que ya en el pasado lo hicieron con Juan Guaidó sin que mediase un voto o acta de por medio.
Afortunadamente no se conocen colonias espaciales humanas o alienígenas porque, cuando se trata de Venezuela, hasta allá podrían llegar convocatorias del cuarto tipo, a saber, intergalácticas.

miércoles, 14 de agosto de 2024

VENEZUELA, PAÍS CÓSMICO

El filósofo mexicano Vasconcelos tiene una buena frase por ahí: los latinoamericanos son la "raza cósmica"; mejor, aun, se llama así el libro donde proclama que, producto de la mezcla de las cuatro razas preexistentes (india, europea, negra y asiática), los latinoamericanos serían la quinta.
Y esa raza, aunque "oprimida", de acuerdo con su teoría que celebra la diversidad y la renovación, estaría llamada a mejorar su moral cultural para constituirse en la raza cósmica y fundar la "era universal de la humanidad" en virtud de una nueva territorialidad y espiritualidad.
Una alentadora e interesante idea que se enmarca en lo utópico cuando pisa el terreno de la espiritualidad, alcanzada a través del ejercicio del amor, lo cual es constante en las historias imposibles del hombre: el amor y el idealismo, la igualdad y la armonía, al parecer son los tópicos perennes de lo inexistente. Dígase al paso, de modo curioso, que tanto "raza cósmica" como "utopía" se hermanan en su común inspiración geográfica (Latinoamérica) tomando en cuenta que Tomas Moro, cuando inventó su lavativa idealista, la encarnó en una isla del océano Atlántico, hoy parte de Brasil, a día y medio de viaje, y a unos 3 mil 500 Km de Venezuela, país éste hoy ombligo del mundo y tema de las presentes líneas.
¿Qué le parece?
En efecto, la profecía se va cumpliendo si usted así lo quiere poner. Venezuela es el eje, el ojo y el ombligo del mundo. Es política interior de casi todos países del planeta. No ocurre nada en Caracas que no sea registrado, discutido, bloqueado, rebatido o apoyado desde el exterior. Es el país cósmico, el universo, pues, según comportamiento del primate Homo sapiens. El éter abarrotador. Si falta un acta en una elección vernácula allá en Caripito, póngase por caso, o se promueve una ley en la Asamblea Nacional, un alemán de por allá, del bosque de Teutoburgo, se entera.
Por cierto, hablando de profecías, Edgar Cayce, estadounidense llamado El Profeta Durmiente, predijo el hundimiento de los EE. UU. y el posicionamiento de Latinoamérica como geopolítica de relevo en el mundo, punto que suma un grano más para esta ociosa disquisición.
Claro está: Venezuela no es Latinoamérica completa para asumir que Vasconcelos o Moros se referían a ella, pero es el país más renombrado del universo y, como se vea, es por antonomasia el ícono de Latinoamérica. Derramó la sangre de cientos de miles de sus nativos para darles la independencia republicana a un montón de países que hoy lo apedrean, aunque tal hecho no borra la historia ni opaca el sol; es, irrebatiblemente, el país más mezclado de la galaxia y su gente encarna con la mayor propiedad científica la "quinta raza" de la que habla el filósofo mexicano; producto de la misma mezcla, ya como quinta raza, sus mujeres son los seres más divinos y hermosos del espacio sideral, contrastando con los rostros repetitivos de los países más llenos de pureza  genética (Perú, Colombia, Ecuador, Uruguay, Paraguay, Argentina, Chile, Panamá, etc., por ejemplificar sólo con el continente de marras); su raza, por lo mismo de la mezcolanza, biológicamente es superior tomando como base científica que lo puro decae y es pobreza (¡el pobre Hitler era un ignorante!), y lo diverso es fuerza y futuro.
En fin, como se corresponde con un país que es ombligo del cosmos, todo es más y superlativo cuando se habla de él, háblese en sentido constructivo o peyorativo: el más sancionado, el más rico, el más bello, el más divino, el más histórico, el más libertador, el más libre, el más feliz, el más traicionado, el más pobre, el más arrecho, el más militar de Latinoamérica, el más hackeado, el de más elecciones en el mundo, el más democrático, el más socialista del mundo, el más envidiado (demostrado por Perú y Colombia), el más visitado, el más heroico, el más generoso, el más paternal, el más codiciado, el más diverso, el más migratorio e inmigratorio, el más…
Teniendo, pues, la atención que tiene, como se dijo, no se pela una rodilla un opositor político, por ejemplo, sin que la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas se entere, aunque eso le reste un poco de su importante atención sobre los asesinatos israelíes y gringos contra el casi extinto pueblo palestino; o no se pedorrea el presidente de la república sin que los químicos de la ciencia internacional olfateen la fragancia para determinar su salud o especular su muerte. En tal sentido es loable decir que varios presidentes latinoamericanos, encabezados por el argentino Milei, están muy pendientes de esta ciencia.
Un aspecto es central en esa lista rasante expuesta arriba: Venezuela es la mina más enorme de la creación. Usted, que lee, llénela con la imaginación mineral que se le ocurra y, si no acierta como primer lugar, lo hará como segundo o décimo, pero lo hará. Por último, coméntese un aspecto que no se incluyó en la lista: es el país más odiado y vilipendiado por sus hermanos peruanos, ecuatorianos, colombianos, chilenos, panameños, como lo demostró la última migración de venezolanos hacia esas geografías, haciendo caso omiso de que Venezuela en el pasado los acogió con amor cuando les toco a ellos abandonar sus patrias. Bueno, es que el hecho de ser la quinta raza no está eximio de bajezas como la envidia o alturas como el cariño, aunque se sea oprimido, como dice Vasconcelos, pero oprimido en tanto amenaza para relevar el mundo. ¿Perú, que culpa hay en que una venezolana sea más bella que una nativa vuestra?; ¿Colombia, que culpa tiene Bolívar de que carezcas de historia y que la que tienes sea la de Venezuela?; ¿Argentina, tiene algo de malo tu agricultura y ganadería para que envidies la mineralogía venezolana? ¿Uruguay, Paraguay, gentilicios fríos, por qué os molestáis con el humor feliz de los venezolanos?
La literatura sociopolítica y hasta ocultista podría concluir que tocar a Venezuela como vértebra del orbe podría ser fatal y generar un desplome de la delicada armonía mundial. Si tocan a Venezuela, podría caerse el cielo. El peligro es que abundan en la actualidad aventureros (como los EE. UU., Inglaterra, Brasil) que sueñan con adueñarse de las vastas riquezas de la tierra de El Dorado.

sábado, 10 de agosto de 2024

ALGÚN DÍA

Algún día habrá que hacerlo, atreverse. Hasta ahora se ha sido cauto con los EE. UU., justificando la inacción con el argumento de la paz, la amplitud y la vocación de diálogo. A veces se da la impresión de temer, de ser un país timorato, lo que no va con Venezuela, gentilicio que derrotó en buena lid al imperio español y regó la independencia por el continente. A veces se da la impresión de que Venezuela tiene cuidos de no hacer cosas que molesten a los gringos, siempre como dejando la puerta abierta para el retorno y la reconciliación, el restablecimiento de relaciones. ¡Joder!
 Mientras tanto ellos actúan a sus anchas y diseñan la política, preparan la pastilla a tomar y el vaso con agua. Así ocurrió con Juan Guaidó, el autoproclamado pero protegido por el imperio: anduvo como rey en Venezuela porque lo reconocieron como presidente de la patria de Bolívar desde Washington y advirtieron que no se le detuviera. Y lo lanzaron como un misil contra Venezuela, lo cual fue un ataque, no respondido, perdido en las neblinas de la impunidad.
Después vino lo de las transnacionales petroleras, que al parecer se meten como quieren en los bloques minerales y logran concesiones, no obstante los abiertos ataques y sanciones de su país origen contra Venezuela. ExxonMóbil, Chevron: nunca dejará de sorprender el hecho de que, procediendo de un país enemigo (¿son los EE. UU. amigos de Venezuela?), comportándose como empresas enemigas (por ahí andan conspirando y robándose el petróleo desde Guyana), siempre están libando petróleo para Gringolandia.
Y ahora caminan por ahí María Corina Machado y Edmundo González, los nuevos muñecos democráticos de los EE. UU. para América Latina, alzaditos ellos, con un letrero pegado a sus espaldas que dice: "Made in USA". No me toques, carajo. Los del norte amenazaron con consecuencias "inimaginables" si la justicia venezolana los arrestaba. ¡Mosca, pues! ¡EE. UU., el omnímodo país con un piso jurídico que aplasta las baldosas legales de Venezuela! El viejito no está aún reconocido como presidente desde allá, pero, cuidado, es, por los momentos, su pieza de cálculo.
Hay países que se han atrevido. Irán vengó un ataque que le hicieran los EE. UU.: le bombardeó en Irak a una pila de sus soldados, y los gringos no tuvieron cojones para seguir replicando. Ni hablar de Corea del Norte, que les replica cada pulgada de ofensa y hasta les insinúa a cada rato un bombardeo nuclear. Turquía le habla de tu a tu a los gringos.
Algún día habrá que atreverse, cual se corresponde con un país de historial heroico como Venezuela. Decir "¡No!" a los gringos y afrontar el destino de la lucha y la independencia, en espíritu bolivariano. Venezuela con su legislación propia, proceder propio, cuidando sus intereses, sin estar pendientes si al gringo le gustó o no. ¡Que no tema un ciudadano de esos de a pata que le puedan meter más años de cárcel que a un chivito de esos protegidos por estar tumbando las mismas estatuas! Bonita sería la construcción de un presidio con un cuarto para Edmundo y el otro para María Corina. Algún día.

miércoles, 7 de agosto de 2024

DEL SENTIDO DE LA JUSTICIA O IMPUNIDAD EN LA GENTE QUE COME EMPANADAS

Cuando en una sociedad hay situaciones de impunidad rampante, como la de Henrique Capriles, Juan Guaidó o María Corina Machado, el ciudadano común, que también puede sentir inmensos deseos de descargar su arrechera sin que nadie lo aprese, puede sufrir un cortocircuito cerebral tratando de explicarse por qué a una de esas estrellas de allá arriba nadie les cobra nada y a él, en cambio, le pueden pintar una paloma condenatoria de hasta treinta años.
El ciudadano común, vulgarmente llamado también "de a pie", es ése que sobrevive con sus ingresos, come empanadas regularmente y redondea el cuadro de su sencilla felicidad zampándose unas veinte cervezas el fin de semana. El ciudadano estrella, por su parte, también puede que con frecuencia se zampe unas empanadas y hasta un montón de cervezas, pero nunca estará en condición de supervivencia por el ejercicio de tales hábitos.
El cortocircuito empieza cuando un ciudadano corriente de estos nota que puede comer empanadas como lo hace también un ciudadano de aquellos, estrellas, pagando el mismo costo; y explota cuando descubren que, si derriban una estatua o atropellan a algún desventurado, por ejemplo, reciben tratamientos distintos.
Por ejemplo, se dice que Julio Borges atropelló con su vehículo a un juvenil y nadie le dijo pío; se dice, también, que el mismo Capriles mandó a un gentío a matarse a las calles y todavía anda por ahí riéndose de la verga, viendo películas en sus Cines Unidos; y ahora se habla de que el candidato Edmundo, que bastante se igualó a los pendejos comiendo empanadas durante su campaña, es un agente de la CIA, como si nada, y matador de gentes en Centroamérica. Para coronar, María Corina Machado, una política inhabilitada, le dio la gana de lanzarse a presidenta y crear un CNE paralelo sin que le picase ni un mosquito.
Es que estos carajos son como esas naves alienígenas recubiertas por una especie de escudo magnético que hace que reboten las flechas de la justicia. La triste realidad para el pendejito corriente es que, si se le ocurre comerse una empanada y no pagarla, por decir mínimo, matar a un perro de raza, por decir medio, o mal descargar una arrechera como una estrella de aquellas acometiendo una locura, por decir máximo, ¡joder, le cae hasta una lluvia de meteoritos justicieros, no salvándose de la putrefacción en la cárcel, aunque corra o se encarame!
Carajo, ahí mismito se le leen sus derechos y delitos, y hasta es posible que lo encarcelen de antemano si, por ejemplo, se le ocurre dársela de estrella (que no de arrecho) y no asistir a la citación. ¡Échenle bolas, el viejito Edmundo y su compañera política se dieron el gustazo de no asistir a una citación nada menos que del Tribunal Supremo de Justicia, sacándoles la lengua a las togas y girando las manos dentro de los oídos contra los ensacados magistrados! ¡Una pelusa!
Para evitar los chispazos neuronales, lo que debe saber todo comedor de empanadas en condición de supervivencia es que en política hay una atmósfera especial, de otra dimensión, donde los objetos y personas se mueven o detienen según un reloj de oportunidades o conveniencias del eje central. Si se malogra un perol de esos en pleno movimiento, deteniéndolo, por ejemplo, cuando tiene que seguir caminando, es probable que se destruya el susodicho mando central de cualquier sociedad en mil pedazos. La política es el lado inasible o guabinoso de toda sociedad. En ella es posible que una estrella de repente se aplaste contra el suelo o que un pata-en-el-suelo, también de repente, se convierta en sol, dejando de tragar empanaditas para degustar vinos con caviar, en vez de las horribles cervezas de siempre. Es entonces cuando ambos, estrella caída como sol refulgente, descubren que deben ajustarse a otros ritmos dimensionales.
Así, en fin, conclúyase diciendo que, aunque se libre una orden de captura contra María Corina Machado, por ejemplo, es completamente contraproducente en estos momentos su arresto; como también hay que decir que desde hace rato parece oportuno que Juan Guaidó o Henrique Capriles paguen por sus crímenes, deteniéndolos. En ambas situaciones, de contrariarse la lógica política dimensional, puede estropearse el ralentí del mando central, amén de los circuitos de un montón de cerebritos comunes por ahí.

lunes, 5 de agosto de 2024

SE DESINFLÓ MARÍA CORINA MACHADO: LA MATÓ LA LEY CONSTITUCIONAL CONTRA EL ODIO

Cunde en las redes sociales y en los espacios de opinión digital que Nicolás Maduro y su gobierno no se prepararon para repeler lo que, como una crónica de hechos anunciados, se avecinaba después de las elecciones, en las que previsto estaba que el sector extremista de la oposición cantara fraude. Latones de tinta digital se observaron impresos: en general, las expresiones concluyeron que, inepto el candidato y su tren de gobierno, justo es que contra ellos ocurriese lo que ocurrió en las calles el lunes e irresponsable es que se permita que tales hechos ocurran contra la paz de los venezolanos por no prevenir. Por supuesto que hay otros latones que avalan de modo tácito lo que ocurrió, hasta pareciéndole injusto que no haya ocurrido más.
El hecho es que ya se terminó. Se espichó María Corina Machado (MCM) y su candidato "tapa", Edmundo González Urrutia (EGU). No más cauchos expidiendo humo en las calles, trancando avenidas; ni saqueos a los comercios, ni terror guarimbero, eventos acaecidos solamente el día 29 de julio, un día después de las elecciones. De manera que su grito de guerra contra el fraude, lanzado con la idea de incendiar la pradera como en elecciones anteriores, desancló de la tierra venezolana, aunque, como todo grito, se elevó y arrancó en otros seguidores exteriores las pasiones ansiadas.
Un tendencioso medio reseña así su convocatoria para el día sábado 3 de agosto, presumiblemente para opacar con caos la concentración popular que, a su vez, había hecho el líder bolivariano: "A diferencia del cierre de campaña el pasado 25 de julio, en esta ocasión había más espacios vacíos."[i] Notable es resaltarlo, más allá del modo cauteloso de este medio aliado para ocultar las ronchas ("más espacios vacíos" tiene su equivalente en "poca gente"); y enfática fue también la ambición de MCM en su frustrada convocatoria: llamó a los ciudadanos a que salieran en "familia" "en todas las ciudades" para "cobrar" la victoria electoral, mientras, paradójicamente, ella pasaba a la clandestinidad.[ii] [iii] Nótese, además,  que tanto en la convocatoria como en la escasa concentración misma no estuvo presente el candidato EGU, siendo el hecho que la chica nunca fue candidata legítima para nada por estar inhabilitada.
La aprobación en 2017 de la Ley Constitucional contra el Odio, por la Convivencia pacífica y la Tolerancia (LCOCT), hizo, en gran medida, mella en el hundimiento del barco ultraderechista opositor y constituyó, a la vista de los resultados, un hecho estratégico por parte del gobierno, hoy complementado con diversas tácticas operativas bastante exitosas. En primer lugar, dígase que dicha ley, que nació al calor de la experiencia en medio del hervideros desestabilizador opositor de 2017, se enfoca penalmente en sancionar a personas jurídicas y naturales que profieran expresiones de incitación al odio tanto en los medios de comunicación (redes sociales) como en la convivencia de facto; en segundo lugar, que demostró alta eficiencia al acompañarse su aplicación con la proyección de imágenes de las personas sancionadas en los mismos medios utilizados para cometer el delito.
Su número mágico y terrorífico en general es diez: diez años de cárcel para los odiadores, con penas que pueden extenderse a veinte. Posee dos artículos centrales, pudiéndoseles denominar causa-efecto:
Se prohíbe toda propaganda y mensajes a favor de la guerra y toda apología del odio nacional, racial, étnico, religioso, político, social, ideológico, de género, orientación sexual, identidad de género, expresión de género y de cualquier otra naturaleza que constituya incitación a la discriminación, la intolerancia o la violencia (Art. 13).
Quien públicamente o mediante cualquier medio apto para su difusión pública fomente, promueva o incite al odio, la discriminación o la violencia contra una persona o conjunto de personas, en razón de su pertenencia real o presunta a determinado grupo social, étnico, religioso, político, de orientación sexual, de identidad de género, de expresión de género o cualquier otro motivo discriminatorio será sancionado con prisión de diez a veinte años, sin perjuicio de la responsabilidad civil y disciplinaria por los daños causados (Art. 20)[iv]  
En virtud de esta ley, protagónica desde el acaecimiento de los desórdenes del día lunes 29 de julio, dos eventos notables ocurrieron el día 3 de agosto, día de la "mega convocatoria" hecha por MCM: (1) no hubo la afluencia ciudadana ni tampoco las repercusiones violentas esperadas con su concentración (lo cual es una anomalía ultraderechista) dado que se respiraba un aura de "delito" en el ambiente por los muchos llamados a la violencia y el odio que desde el lunes habían hecho los revoltosos, ausentes, por lo visto, en el acto político de marras, espantados, con toda seguridad, por las imágenes de captura publicadas por la llamada Operación Tun, Tun;[v] [vi] (2) los medios de comunicación, especialmente televisivos (Televen, Venevisión, entre otros), que en otro tiempo jugaron un papel determinante en el propiciamiento de la violencia, guardaron un silencio casi absoluto respecto de la concentración opositora, probablemente porque ella misma no era (ni es) una figura legal y porque, también, de acuerdo con la LCOCT, se contemplan multas y penas de cierre corporativos.
Podría decirse, entonces, con certeza, que ese llenado del vacío legal para castigar un delito de odio en Venezuela que se colmó con la LCOCT en gran medida contuvo la violencia esperada con la convocatoria de MCM en Caracas. Váyase a los hechos, sorprendentemente espectaculares: un funcionario de seguridad de Estado se presenta en una morada y dice; "Por el delito de incitación al odio, está usted detenido, debiendo acompañarnos"; desde el día martes, después de la quema de instituciones del Estado, hospitales, casas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), asesinato de un militar, derribo de estatuas y saqueos a locales afectos a las misiones de alimentación gubernamentales, proliferaron en las redes sociales videos de la Operación Tun Tun mostrando a chavales arrepentidos de sus actos y a madres llorando lastimosamente por el temor de detención de sus hijos, involucrados en los bochinches. Reitérese: las penas pueden alcanzar hasta los veinte años de prisión.
De manera que es falso que no se haya alcanzado un nivel de madurez y previsión políticas tanto en el gobierno como ente responsable de procurar la paz como en la ciudadanía como agente causal (contrato social). Se aprendió sobre la marcha en la oleada de protestas políticas de 2017, se tomaron medidas y hoy hay una recolección del fruto cultivado: relativa paz. Inclusive, tomando en cuenta la amenaza que le hiciera Maduro a los EE. UU. y la UE en el sentido de concederle a los BRICS la explotación de los bloques minerales asignadas a ellos, afírmese que no sólo se previno el gobierno en su misión de mantener la paz en lo interno, sino que se preparó con medidas de contraataque para lo externo.
Se acabó MCM como factor de violencia en el ámbito interior nacional con el ingente apoyo de masas. Véase la calle. Hay normalidad. Los factores comunicacionales de apoyo histórico, al topar con la pauta sancionatoria, se vieron obligados a abandonarla. La gente, los comercios y las instituciones trabajan. Su efecto fue fugaz. La misma ciudadanía opositora comenta en la calle que volver a la violencia es atraso. Ciérrese el punto aclarando que, a pesar del mea culpa de quienes incurrieron en faltas, en verdad están en aprietos debido a que la comisión de un delito de odio constituye una violación a los derechos humanos y es un hecho imprescriptible (Art. 24).
Ahora, que MCM continúe inflada en la esfera exterior, es un asunto que toma vuelo sobre otros espacios de intereses en la galaxia. Para nadie se ocultó que ni la UE ni los EE. UU. reconocerían el triunfo electoral de Nicolás Maduro: ¡si no necesitaron de la existencia de un acta para proclamar a Juan Guaidó como presidente de Venezuela (que no fue a ninguna elección), cabe esperar que con mayor razón proclamen a EGU, que fue a elección y ofrece actas como argumento! A MCM se le expiró su órbita dentro de Venezuela, pero continuará orbitando en el exterior apalancada por los intereses filibusteros de las potencias colonialistas: todavía hay para robar toneladas de oro venezolano en Inglaterra y activos de CITGO que otorgar desde los EE. UU. En ese aspecto ─¡eso sí!─ la historia está claramente escrita: el dúo MCM y EGU serán los baluartes de un nuevo y fantasmagórico gobierno paralelo financiado con los dineros de la república.
 
NOTAS Y REFERENCIAS

[i] 'Miles de Personas Acompañaron a María Corina Machado En Caracas (Fotos) - Efecto Cocuyo' <https://efectococuyo.com/politica/miles-de-personas-acompanaron-a-maria-corina-machado-en-caracas-fotos/> [accessed 4 August 2024].
[ii] Ibid.
[iii] 'Minuto a Minuto: Así Se Vive La Concentración Convocada Por María Corina Machado' <https://www.larepublica.co/globoeconomia/en-vivo-concentracion-venezolana-convocada-por-maria-corina-machado-3922425> [accessed 4 August 2024].
[iv] Asamblea Nacional Constituyente, "ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE." <https://www.asambleanacional.gob.ve/storage/documentos/leyes/ley-constitucional-contra-el-odio-por-la-convivencia-pacifica-y-la-tolerancia-20220215163238.pdf> [accessed 4 August 2024].
[v] 'Operación Tun Tun - Wikipedia, La Enciclopedia Libre' <https://es.wikipedia.org/wiki/Operaci%C3%B3n_Tun_Tun> [accessed 4 August 2024].
[vi] 'Continúa Operación Tun Tun Contra Guarimberos - Radio Miraflores' <https://radiomiraflores.net.ve/continua-operacion-tun-tun-contra-guarimberos/> [accessed 4 August 2024].

jueves, 1 de agosto de 2024

ELECCIONES PRESIDENCIALES 2060: LA REVANCHA [FICCIÓN POLÍTICA]

Diciembre de 2050. Cielo grisáceo, como de lluvia. Algunos taxis voladores cruzando el cielo sobre Caracas. En el patio del Palacio de Miraflores un adulto mayor de 88 años inclina su alta estatura sobre unos tiestos del jardín, jorungando unas plantas. Es Nicolas Maduro, presidente de Venezuela.
Junto a su esposa, pasa revista a algunos espacios poco frecuentados del palacio, mientras se apresta para reunirse con una delegación de ingenieros genéticos de China. Tiene el propósito, con anuencia del partido y el terror de la oposición, de clonar los restos del difunto Hugo Chávez, además de Simón Bolívar, para educarlos en una escuela de cuadros políticos y contar a futuro con sus magnos servicios para la república.
La ciencia había evolucionado un montón desde que en 2013 desapareciera su comandante y él asumiera su legado como presidente de los venezolanos. En 2040 la ciencia había logrado unos hitos históricos: declaró la vejez como enfermedad y, al descubrir su mecanismo fisiológico, la neutralizó para siempre. Se vivían, en consecuencia, tiempos de inmortalidad para el género humano.
─Así es, amiga mía ─musita a su consorte─, ahora que los hombres son inmortales uno descubre que nada cambia en su corazón. Fíjate ─desplegando un fajo anacrónico de papeles periódicos que había traído para la ocasión─: la OEA, la UE, los EEUU y hasta la OTAN, que nunca han querido a la Venezuela revolucionaria, todavía están pidiendo pruebas de legitimidad de mis elecciones. ¿Qué te parece? Ese Almagro sigue en lo suyo a pesar de que esa OEA no sirve para nada y no tiene nada que ver con nosotros.
Se rieron un rato, especialmente por la presencia de los curiosos papeles.
 ─Siete períodos presidenciales ya y no aprenden que el pueblo realiza su elección. ¿Cómo la ves? En todas he resultado ser un tramposo. ¿Sabes que les molesta en particular? Las elecciones de 2024, cuando estuvieron cerca de confundir a todos con su golpe de Estado electrónico a través del CNE. ¿Te recuerdas? Llenaron las calles de las mentes de los venezolanos (no las calles reales) con videos viejos de violencia y confusión, y hackearon con apoyo del gigamillonario Musk la informática del CNE. ¡Vaya con la vida eterna! ─exclama mirando el Waraira Repano─. ¡También sirve para eternizar la estupidez humana! Hay que reconocer que estuvieron cerca esos conspiradores de imponer a aquella mujer inhabilitada con el candidato viejito… ¡Una locura!...
La activación de un holograma en un trecho del pasillo ilumina sus rostros y los distrae un momento. Anuncia la llegada de los genetistas, recordándoles que, según la agenda, estarían en el Salón Pantano de Vargas, disponiendo ellos de unos quince minutos para atenderlos.
─¿Y te recuerdas que entonces la gente la bautizó como la sayona? ─exclama jocosamente la mujer, volviendo al tema de la candidata proscrita, donde lo habían dejado.
─Sí, claro, ¡cómo no! ¡Y estuvo bueno, porque la oposición, si te pones a ver, es un llanto eterno por llegar al poder! Tienen más de medio siglo gimoteando desde la llegada del comandante, a quien, dios mediante, por cierto, confiamos en revivirlo de algún modo y mantener la revolución con él más allá de los doscientos años en ejercicio. Son unos llorones.
─Bueno, ya no la llaman la Sayona, sino la Mosca, como la apodó Chávez en la Asamblea Nacional de aquellos viejos tiempos.
─¿Dónde estará, por cierto, esa señora?
─Recuerda que sigue inhabilitada todavía hasta el 2060. Dicen que se retiró para dejar pasar la fecha y volver de verdad como candidata para las elecciones de ese año; que se está portando bien, que se hizo unas terapias y rejuveneció como hasta los veinte años de apariencia, y que se ve ágil y rápida como un mosquito o mosca. Pero, ya sabes, la gente no la quiere porque se sigue limpiando cuando un pobre la toca y porque, al parecer, dijo que menos mal que el viejito no ganó las elecciones en 2024 debido a que, con la edad que tenía, no hubiera llegado al 2040 para aplicarse la vacuna de la longevidad…
─¡Vaya mujer! ¿Y eso?
─¡Es que ella aspira hacerse eterna en el poder, de alcanzarlo, según reza! Dicen que no duerme y prepara una maquinaria tremenda, y unos planes casi infalibles de canje de las riquezas del país por apoyo internacional… ¡Bueno, ya la conoces...!
─No me extrañaría…
La pareja se aleja por el pasillo hacia el interior del palacio, atravesando el holograma, que nuevamente se había encendido para recordar, dejando a su paso risas y murmullos sobre fantasmagorías del pasado.
El cielo oscurece y, finalmente, se desata la lluvia, lo cual contrasta fuertemente las luces del tráfico de vehículos aéreos sobre la Gran Caracas y por encima de la mole de la montaña.

miércoles, 31 de julio de 2024

EL LÍO DE LAS ACTAS

Evítese leer el presente artículo viendo el explícito video de Juan Carlos Monedero (https://x.com/MonederoJC/status/1818488714026246173).
De acuerdo con los resultados del Consejo Nacional Electoral (CNE), se proclama un ganador sobre la base del examen del 80% de las mesas escrutadas, cifra que lanza una proyección sobre el restante 20%. Así, Nicolas Maduro es proclamado con un 51,2 % de votos obtenidos.
Pero hay una situación que, en apariencia, parece trancar el procedimiento versátil que ha caracterizado al CNE, y es el hecho que la "candidata" opositora, como un ente electoral paralelo, aparte de asegurar que conoce del 100% de las actas transmitidas al CNE, enfatiza tener en su poder un 40% de ellas, base sobre la cual ella también proclama a Edmundo González como vencedor de la contienda con un setenta y tanto por ciento de apoyo.
La pregunta para realizar es la siguiente: ¿logró vulnerar María Corina Machado (MCM) una eventual verificación física de resultados del CNE con el secuestro de algún material electoral y la forja de un porcentaje importante de actas que, finalmente, generarían una inconsistencia?
Aunque, en apariencia, parezca que sí, la realidad es que el CNE, en posesión del 100% de la transmisión de los resultados, requiere nada más de ese 55% de auscultación o verificación de actas que se hace en las mesas de cada centro de votación antes de su transmisión. De manera que, en términos legales, el presunto secuestro físico de votos, póngase por caso, o forja de actas no afectaría la proclamación realizada por el ente rector electoral, porque ha de suponerse que, si dijo haber escrutado el 80% de las mesas, no hay manera que un presunto 40% en posesión de la "candidata" (si es que tiene esa cifra) pueda malograr el resultado promulgado.
Y, para el caso de que algunos centros hayan transmitido y no dispongan de los correspondientes respaldos físicos, déjese sentado que sistema electoral actual hace prevalecer el conteo que arroja la máquina sobre el conteo manual de las actas justamente para evitar la tradicional trampa que se hacía en Venezuela con el procedimiento expresado detrás de la frase "acta mata voto". En la era de Hugo Chávez esa mecánica murió con sus ejecutores cuartorrepublicanos. Máquina mata acta. Así que MCM puede tener en sus manos hasta un 120% de las actas de votación, si ella así quiere expresarlo, pero sería de modo inútil dado que todas pueden ser susceptibles de forjamiento, lo cual no pasa con las máquinas y sus electrónicos reportes, transmitidos de facto a la hora del cierre y almacenados como pruebas tanto en el ente receptor como en el mismo aparato de votación emisor.
MCM en sus declaraciones ha hecho énfasis en poseer el 40% de las actas. ¿A qué se referirá, cabe preguntar? ¿Tiene físicamente un secuestro de por lo menos un 15% de un material electoral, procedente de sitios donde su preferencia arrasó y donde el Plan República no pudo recuperarlas? Hay comprobaciones visuales donde se constata la dificultad de los militares para hacerse con las urnas de votación (eso explica en parte el acaecimiento de los disturbios). ¿Existe la ilusión de impugnar con el pequeño porcentaje en posesión personal el porcentaje mayor bajo dominio institucional? ¿Aspira a impugnar con la posesión de un pequeño material faltante en el CNE la globalidad de un sufragio? Liquidar una estructura jurídica con la comisión de un delito.
Habría que decir que tal imaginería, aun disponiendo MCM físicamente del 40% de un material electoral, o de un 7000% de actas, como parece aseverar en sus fantásticas intervenciones, se viene al suelo porque, como dice el clisé, el sistema electoral está blindado para impedir el asesinato del voto mediante las actas.
Lo que sí es cierto en un 100% es que MCM, con las actas y otro material electoral de los centros de votación donde arrasó (El Hatillo, en Caracas, o San Diego en Carabobo, por ejemplo), hizo la proyección contraria a la realizada por el CNE: con un 20% de actas de sitios afectos donde logró manipular pobló el restante 80% de la votación del país.
Los otros puntos, como el delito de hacerse con material electoral, usurpar funciones o el descaro de los complotados internacionales para aprovecharse de este infundio y cuestionar la legalidad y legitimidad del proceso electoral, es asunto para los tribunales de justicia u otro escrito.

martes, 30 de julio de 2024

TE DEVUELVO TU BONO Y TU CLAP [FICCIÓN POLÍTICA]

Hubo varios montajes de agresión en la Av. Baralt el día 29, un día después de las elecciones presidenciales, en medio del esfuerzo de la oposición venezolana para incendiar el país con protestas y desconocimiento de resultados electorales. Algunas decenas de motorizados se distribuyeron a lo largo de la avenida y, con sus rugidos y rápidas piruetas, hicieron correr a la población. Ya con la zona "tomada" para sus fines, gritando consignas de ir a Miraflores y derrocar al tirano, ensayaron varias tomas con sus actores y cámaras, deliberadamente en sitios donde los residentes de apartamentos pudieran no solo observarlos, sino grabarlos con sus teléfonos.
La película comenzó cuando unos presuntos colectivos progubernamentales aparecieron en el sitio para repeler a los insurrectos antichavistas. Una de las tomas consistió en el asesinato de un descomunal gordo de camisa blanca, quien aparece boca abajo en las imágenes despidiendo un contrastante chorrito de sangre (destáquese la franela limpísima y el desproporcionado hilillo de sangre); la otra, en el despojo de las pertenencias de un ciudadano a punta de pistola, mismo que protestaba cívicamente en la calle.
La segunda escena la contempló a boca de jarro un conocido opositor de unos de los edificios, llamado Monasterios en alusión a un humorista venezolano que gustaba erotizar sus escritos. La combinación de erotismo y humor le calzaba espléndidamente debido a que tuvo fama de seductor desastroso: conquistaba a las féminas, pero luego éstas huían espantadas al corroborar que el hombre tenía un miembro viril en extremo pequeño.
Desde su balcón vio cómo golpeaban al "inocente" marchista para robarle su morral, donde llevaba un paquete de harina de maíz, otro de arroz y una bolsa húmeda rojiza, presuntamente carne. Sus gritos estremecieron sus fibras y las claras palabras "¡Es la comida de mis hijos!" aplastaron su sensibilidad.
De inmediato se retiró del balcón, pero no supo qué hacer en concreto. Su esposa, tan perturbada políticamente como él, lo miró con impotencia.
─ ¡Ya pasará, mi amor! Todas esas injusticias algún día serán castigadas.
No resistió más. Tenía un deseo inmenso de llorar y su corazón, aprisionado entre sus carnes grasosas, saltaba con violencia. Se dirigió con decisión hacia la puerta, ocultando el rostro a su mujer: la calle lo llamaba, le susurraba de mil modos dentro de su ser, hablándole a los múltiples quijotes que durante ese momento apremiaban a su alma. Había que hacer algo, desfacer entuertos. Pero al sentir el dintel sobre su cabeza, se detuvo: era peligroso y preparado no estaba para prescindir de la dulzura y solidaridad de una mujer como su esposa.
Lo meditó, besó con emoción de guerrero en calma a su mujer, se bañó y, finalmente, se sentó frente al computador, escribiéndole a los grupos WhatsApp del Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP) y al grupo administrativo de su edificio:
"─Yo, X. Monasterios, por medio de la presente, no pudiendo seguir viviendo en medio de la indignación de un régimen de porquerías y latrocinio, como lo demostró el domingo con el robo de las elecciones, y no pudiendo recibir ningún tipo de beneficio procedente de tales monstruos que acaban de quitarle la comida de los hijos a un indefenso hombre que ejercía su derecho de protesta en la calle (¡lo vi con mis ojos!), renuncio irrevocablemente a la bolsa de alimentos CLAP y a los miserables bonos de la patria que me asignan."

lunes, 29 de julio de 2024

RÁPIDO ANÁLISIS DEL TRIUNFO DE MADURO: ALTA PARTICIPACIÓN Y, NUEVAMENTE, LA AMENAZA EXTRANJERA CON APALANCAMIENTO INTERNO

Con una ventaja que ronda casi el millón de votos, ganó Nicolás Maduro las elecciones presidenciales de Venezuela, 28 de julio de 2024, según el primer boletín de Consejo Nacional Electoral (CNE).[i] Maduro 5 millones 150 mil 092 votos y Edmundo González 4 millones 445 mil 978. ¡Una pela de 7,18% de diferencia si se compara con el 1.49% diferencial entre Maduro y Henrique Capriles en 2.013!
En ese entonces, año luctuoso para el país por la muerte de Hugo Chávez, un compungido Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) casi pierde las elecciones presidenciales ante la coalición opositora. Es lo más cerca que ha estado la derecha de ganarle la contienda al chavismo desde 1.998. ¡223 mil 599 votos fue la diferencia!
Con una sumatoria de votos hasta el momento de 10 millones 58 mil 774, faltando el escrutinio de unos 2 millones 11 mil 754, se podría estimar que votaron 12 millones 70 mil 528 electores, de 21 millones 392 mil 464 electores inscritos en el padrón electoral, una participación del 56.4%
Pero, puestos a creer en las mismas maquinaciones numéricas del adversario, que de antemano se dispuso a quitarle brillo a una eventual victoria de Maduro por la ausencia del emigrado con capacidad de voto (unos 4 millones 500 mil electores),[ii] habría entonces que estimar que la participación real aproximada fue de 71.4% (cálculo sobre la base de un mundo elector de 16 millones 924 mil 464), una cifra más que respetable en cualquier arena política del planeta. El venezolano, pues, participó vigorosamente y ejerció un voto prácticamente polarizado.
Para el sector opositor, resulta majaderamente doloroso que el mismo razonamiento que utilizó sobre la emigración para descalificar tanto el eventual triunfo madurista como el proceso electoral, pueda utilizarse con el efecto contrario para robustecer. El hecho que parece innegable es que en una elección deciden los electores que están en el país y el asunto sobre la cosa venezolana lo resuelven los venezolanos que viven en Venezuela, y no extranjeros o personas que transitan la senda de la desnacionalización.
Sabido es que ahora la líder opositora María Corina Machado (MCM), a través del candidato oficial opositor, no reconoció los resultados y proclamó, de modo personal, a Edmundo González como presidente de Venezuela. A su decir, ganó en "todos los estados del país", de modo "abrumador", sobre la base de la posesión del 40% de las actas y de tres sondeos a boca de urna que confirman una alta participación y la derrota de Maduro, quien habría logrado un apoyo del 30% frente a un 70% de González.[iii]
Como se esperaba desde el mismo momento en que no firmó el compromiso de reconocimiento de los resultados electorales ante el CNE, el sector opositor ultraderechista parece aprestarse a la tradicional confrontación de la que ha hecho gala frente a resultados electorales adversos, específicamente violenta si se toma en cuenta que quien motorizará la protesta es MCM, una candidata proscrita que ha sido acusada de recibir fondos extranjeros para su campaña, ha pedido sanciones para asfixiar la economía bolivariana e invasión extranjera para deponer al presidente de la república. Si lo anteriormente dicho lo ejecutó cuando no estaba involucrada directamente como candidata en una contienda política, evalúese lo que será capaz de realizar ahora que está involucrada con su candidato "tapa" bajo resultados adversos. La reedición de las famosas guarimbas podría lucir como la ejecución de una acción tímida.
Por lo mismo, se espera la expresión de una narrativa dirigida a concatenar esfuerzos extranjeros (EE.UU., UE, OEA, reedición del Grupo de Lima) para sancionar a Venezuela y envolverla, nuevamente, bajo una aureola de ilegitimidad. Considérese el prontuario electoral de Nicolas Maduro, al que podría sumársele una nueva "condecoración" desde las filas adversas: no reconocido por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en 2013, ni por la Asamblea Nacional (paralela), el Tribunal Supremo de Justicia en el exilio (esto es gracioso, pero así lo presenta la tendenciosa página de Wikipedia),[iv] la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, la OEA y una veintena de países en las elecciones de 2018.
 
NOTAS Y REFERENCIAS


[i] 'Consejo Nacional Electoral': <http://www.cne.gob.ve/web/sala_prensa/noticia_detallada.php?id=4266> [accessed 28 July 2024].
[ii] 'Elecciones Presidenciales de Venezuela de 2024 - Wikipedia, La Enciclopedia Libre' <https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_presidenciales_de_Venezuela_de_2024> [accessed 16 July 2024].
[iii] 'Palabras de María Corina Machado y Edmundo González Tras Los Resultados | Elecciones En Venezuela - YouTube' <https://www.youtube.com/watch?v=8TGztUF1WG4> [accessed 28 July 2024].
[iv] 'Anexo: Elecciones En Venezuela - Wikipedia, La Enciclopedia Libre' <https://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Elecciones_en_Venezuela> [accessed 28 July 2024].