miércoles, 30 de julio de 2008

Oro político bolivariano

El dicho popular de que no se es monedita de oro para gustarle a todo el mundo ha mantenido tremenda actualidad en las últimas semanas en el plano de las relaciones internacionales que enmarcan a nuestro país como punto denominador.  Primero fue Uribe, cuando vino a Venezuela, y por aquí y por allá se generaron protestas de ciudadanos enfurecidos hasta la indignación con su presencia.  Luego fue Chávez en España, donde la enfebrecida prensa derechista no halló cómo tragar la presencia del presidente de Venezuela en su país.

Pero lo de monedita de oro no aplica aquí ni para Álvaro Uribe ni para el rey español ni para Rodríguez Zapatero ni para los mismos españoles extremados, porque a la derecha política (incluyendo al "socialismo" español) no le importa la tasación que el pueblo pueda hacer de ella, sino el aparato legal a su disposición para hacer prevalecer su forzada legitimidad, para el caso de haber perdido afincamiento popular.  Si no, véase a Alan García, en Perú, con unos niveles de tan baja popularidad entre su pueblo elector que da pasmo comentarlos; pero como se sabe, si no se cuenta con una medida de desagüe constitucional alternativa, la ley prescribe para cada país un determinado período presidencial, que muchos cumplen con pena, y otros ni con ella ni con gloria, y que al final de las cuentas es el pueblo quien se lo cala olímpicamente.  Es ya paradigmático de la derecha política este desprecio por la voluntad popular, así como de la utilización de la legalidad para entronizar una legitimidad eventualmente ficticia, y llenarse luego la boca con la palabra “democracia”.

Lo de monedita de oro va con el presidente Hugo Chávez, quien, en primer término, hace uso frecuente del dicho popular, y en segundo lugar (aunque más importantemente), milita en una corriente de pensamiento que comulga con la ética de un modo si se quiere religioso.  La doctrina bolivariana, la doctrina marxista, la práctica socialista.  Cuando Uribe vino a Venezuela, no fue él −con toda seguridad− quien desplegaría esa conciencia preocupada por lo que piense de su persona política, sino el presidente Chávez, quien se sabe portador de la antorcha líder en materia de reformas e integración en el continente suramericano. Sus pasos deben ser acertados.

Pero no por megalomanía o cosa parecida se habrá Hugo Chávez  fijado en las apariencias, sino por compromiso ético, por corresponsabilidad ideológica, por la comisión de actos forjadores de "nuevas" actitudes en materia política sobre la base de una estructura doctrinaria que el presidente también apunta a reformar en su praxis con su ejercicio político, so pena de perecer en medio de un mundo dominado por la derecha.  Porque hay que estar claro:  la derecha mundial se apoderó del planeta, triunfó con sus transnacionales de la violencia y sus medios pervertidos de comunicación, y la corriente contraria anida focalizada en los grumos que no digiere:  la desmesura de los pueblos del mundo.  Semejante esquema de las minorías con gran poder y las mayorías debilitadas, en todo tiempo habrá de esperar que el contrario reaccione con tribalismo, dogmatismo o violencia para justificar su imperio de la ley y continuar con su prevalencia.

El acto de reclamar un pan o expresar colectivamente que se tiene hambre, o que determinado gobierno cese en sus funciones contrapopulares, de seguro se concretará en un acto subversivo, por lo que tiene de no respetar las leyes locales de la observación "democrática".  Radicalizarse, arreglárselas para irse al monte con la lucha, es la receta esperada por quienes ansían justificar la ley del garrote genocida para practicar una asepsia entre las filas enemigas.  Ciencia política de lo predecible.

Y ya sabemos que el Hugo Chávez comprometido con la causa popular da brazadas en medio de una corriente infestada por posiciones encontradas respecto de cómo ejercer el poder siéndose militante de la izquierda política.  Desde radicales que utilizan cepos ideológicos para el castigo hasta pseudorrevolucionarios que proponen la abierta estructura política de la derecha, lobos disfrazados de ovejas dentro de las filas de lucha.  Nada fácil.  De modo que, necesariamente, ha de tener el presidente conciencia de sus actos políticos y procesarlos en la criba fundamental de que con su comisión no se le falte al pueblo ni se malogre él mismo como arma de combate, más allá de la observancia ortodoxa ideológica. Allende es el emblema triste de esta última materia.

Puede venir Uribe como sea, del mismo modo que va Bush a cualquier parte del mundo en medio de las más extraordinarias manifestaciones de rechazo, pero es el presidente venezolano a quien le toca correr con el peso del jucio político por su aceptación en recibirlo, justificándose en el contexto la expresión dicha sobre la monedita de oro.  Él y su equipo de gobierno, conceptuado como "original" en eso de preocupar al poder tradicional con la idea de volcarlo hacia las masas populares cuando en realidad no hace más que encarnar la sempiterna aspiración de una mayor justicia social.  Grupos civiles afectos a la causa chavista, el Partido Comunista de Venezuela (PCV) y otras organizaciones sociales se lanzaron a la calle a protestar la visita del colombiano, a su manera ejerciendo su desacuerdo con la decisión "chavista" de conversar con el “enemigo” para reestablecer relaciones.  Algunos sin comprender más allá de los postulados doctrinarios, otros expresando su honesta y simple opinión, otros para ejercer su solapado "chavismo sin Chávez", como es corriente oír en la calle.

Lo cierto es que Uribe viene y el gobierno de Venezuela abre la puerta porque la "nueva" modalidad de lucha de una estigmatizada corriente política es el uso de las mismas armas de la política adversa, así como la conceptúan ideológicamente, a letra de libro, a saber:  el diálogo, la democracia, las elecciones, las relaciones comerciales, la diplomacia.  Desde Salvador Allende la clase magistral está impartida, en sus vertientes de cómo alcanzar el poder y −también− de cómo perderlo.  Una Colombia en "diálogo" desarma a las huestes imperiales más que la confrontación directa, recurrente pretexto del gobernante estadounidense para decir a cada rato ante el mundo que Colombia es un país aliado amenazado por su vecino, lo cual lo lleva a acariciar la idea de aposentar más tropas en el país para en cualquier momento insurgir contra Venezuela.

"La imagen daguerrotípica del socialismo como un hombre barbudo haciendo vida en una cueva, acorralado por el sistema burgués imperante, es una concesión a la derrota de los tiempos.  La lucha tiene que asumir el formato temporal de la sobrevivencia cultural para hacer trascender la idea, que no muere."

Luce hasta infantil plantearlo así, pero no menos infantil es la argumentación enemiga. Simple acto de movida de piezas sobre el tablero político.  Ni temor ni tampoco adecuación al poderío ajeno, con implicaciones de quiebre de los asuntos esenciales en materia doctrinaria (Maquiavelo aquí no pasa la prueba con su bochornoso cuento de unirse al enemigo).  Para ser cristiano ni importa ni es necesario ser católico en su forma litúrgica; se sigue la enseñanza humanista fundamental en sus postulados y ya.  Ello vale para cualquier historia de la idea que precise correr la forma para salvaguardar la idea.  El mismo cristianismo primitivo, en las honduras de las catacumbas, es ejemplar.  De modo que no podría ser saludable ni para la especie ni para el intelecto humano la conformación de doctrinas que aboguen por la destrucción misma de su condición, a contracorriente de la vida.  Y así lucen quienes se aferran al cuenco de barro de los tiempos, cuando invocan los postulados de la inamovilidad y radicalidad políticos.  Al tiempo lo que es del tiempo, victimario del aspecto formal de las ideas, mas no de ellas mismas en su fundamento.  Decía Jorge Luis Borges que siete u ocho temas animan el repertorio de la historia humana, sin cambios hasta hoy.  Hablaba Platón de un mundo de las ideas esenciales, trascendentes.  El arte, como la política, lo que hace es aproximarse a las esencias.

Lo mismo habría que decir de la visita de Chávez a España, monedita allá no muy bien amada por la jauría comunicacional en manos de la derecha.  Ni por mucha gente a pie −hay que reconocerlo−, sumida como está en el permanente lavado cerebral mediático.  Es España el laboratorio de la guerra mediática europea contra el bolivarianismo integrador que se despliega en América Latina.  Allí se fabrica la noticia sesgada, se sopla y se pone a volar hacia el viejo continente (de donde a su vez se repica para el mundo entero), teniéndose lo que se tiene hasta hoy de nuestro  país en Europa:  una tremenda desinformación, un descomunal sesgo, una olímpica manipulación mediática de los pensantes cerebros.  Puerta a la desbancada informativa es España respecto de Venezuela, "enemigo" que tiene que ser vencido con sus propias armas, como quedó dicho arriba, como quedó vencida en el pasado y cómo debe ser vencida para siempre en su connotación de imperio.  Para ello es necesario el reencuentro.

Por supuesto, hay consideraciones de tipo capitalista que alimentan la aversión del analista reaccionario, más en Venezuela, dentro de las mismas filas del chavismo, que en la España misma, quien  no tiene ningún problema en sopreponerse a los pruritos del amor propio en aras del interés económico.  No es para menos:  el mismo rey tiene intereses en la región, además de los "grupos económicos BBVA, Santander, Telefónicas, Mapfre y Repsol".¹ España como nación, con todo y sus cerebros atosigados por la fruta fementida comunicacional respecto de Venezuela, está urgida de un petróleo lejos del metálico tope monetario de los $200.  Y aquí, en Venezuela, no faltará quien tilde de neoliberal al susodicho socialismo de marras.  Es la última modalidad del ataque político, extendido a las filas opositoras mismas, quienes tendrían que alegrarse por dicha eventualidad, si vamos al caso...

Pero véase como esa especie de derecha socialista que hay en España resuelve sus problemas, presuntamente no muy alejada de las proyectadas crisis económicas para unos cuantos países del mundo, empezando por los EEUU.  Venezuela acumula reservas como para doscientos años de explotación, y, como se sabe, para quien busque una fuente de suministro seguro, la necesidad tiene cara de perro, como reza refrán. (La estructura mundial industrial, fuera de la electricidad, está sustentada en el combustible fósil).  El Hugo Chávez de la monedita de oro, con su visita al país del "cállate", ni cayó a gusto de todos por allá ni por aquí; pero el trabajo político, sobre el contexto esencial de la ideal, explorando la formalidad, debe avanzar a contrapelo de los disgustos de tantos.  Como si hubiera que dejar por sentado, más que todo para enfurecer a tanto bicho protocolar que hay por ahí, que tanto en la derecha como en la izquierda se aplica la tesis despectiva del vulgo que no comprende los giros del obrar político. Y cómo si hubiera tambien que dejar sentado que nunca podría tener la misma connotación programática y ética fundamentales el maniobrar de un izquierdista que el de un derechista, más allá de la técnica política de efecto inmediato.

Hay que finalizar con el señalamiento de los cambios de paradigmas.  Del mismo modo que no se es cristiano primitivo hoy −en el aspecto formal−, tampoco se es el mismo militante del humanismo marxista de la época previa al quiebre de las ideologías; pero militante en tanto al ejercicio del poder político, que no pervirtiendo los fondos de las ideas.  En el mundo de las masas manipuladas de los tiempos que corren, de los demoníacos medios de comunicación y de la opinión pública, el pensamiento asertivo político requiere agilidad de gacela, tomando lo disponible de la tecnología política para mantenerse a flote.  La inflexibilidad tribal o doctrinaria conlleva a la apetecida situación de "dictadura" que tanto promueve la mecánica del poder político mundial para aniquilarla. Confróntese cuando se tenga que confrontar y hágase un tanto igual respecto del diálogo como herramienta política.

La revolución bolivariana requiere del mundo para explicarle sus preceptos, utilizando la vía consagrada para ello, esto es, el diálogo fácil o difícil, pero diálogo al fin, amén del cuartel general de los medios de comunicación. No su omisión o encono, sea sincero o forjado, a título de encarnarse el mejor postulado ideológico de todos los tiempos (junto a la doctrina cristiana, para no molestar a nadie) .  Se puede ser monedita de oro para caerle en gusto a todos, pero en todo tiempo hay que tener el cuido de que el oro ni se agote ni se devalúe ni se deje de apreciar por los hombres, echando mano del recurso  de la inteligencia humana para los fines.  Echando mano de la ciencia.  Se es humano para lo humano.  La imagen daguerrotípica del socialismo como un hombre barbudo haciendo vida en una cueva, acorralado por el sistema burgués imperante, es una concesión a la derrota de los tiempos.  La lucha tiene que asumir el formato temporal de la sobrevivencia cultural para hacer trascender la idea, que no muere.  De otro modo la derrota es segura, tanto así que el mismo espécimen portador de “ideas extrañas” tiene que aprestarse a ser vendido como reliquias en los mercados del neoliberalismo salvaje.

Notas:

¹ José Luis Carpio:  "La Puerta de Alcalá" en Las Verdades de Miguel. - (2008) jul 25 al 31; p. 4.

sábado, 26 de julio de 2008

Juan Manuel Santos y la fisiología del poder en Colombia

La hora de la estrella que llega

Imagen tomada de El Espectador.com ¿Ya quién lo duda?  El ministro de Defensa es el nuevo hombre fuerte de Colombia, o, para hablar con más propiedad, de los halcones de la guerra de Washington en América Latina.  Siempre lo fue para los suyos, la vieja oligarquía que atenaza a Colombia desde siempre, la misma que se la jugó con Uribe y sus paramilitares hasta cuanto pudo aprovechar sus favores; pero su licencia para hablar en nombre del gobierno mancomunado de Colombia y los EEUU la obtiene el 7 de mayo del presente año, día en que se presentó con un discurso ante el Consejo de las Américas, en Washington, para dar un reporte a su Majestad El Rey −se dirá− sobre los pormenores de nuestra América.

No se puede menos que sentir −si él nos representa de algún modo por aquello de ser nacido en nuestras tierras− que vivimos en el pasado, con el sabor de los libros de historia sobre la era colonial en el intelecto, rememorado y vivificado por semejante personaje como recortado de sus páginas.  Juan Manuel Santos, el nuevo Capitán General de la Nueva Granada, presentando sus crónicas al otrora reino anglosajón, sucesor del español.

¿Usted no lo oyó o leyó?   Fue impresionante su entrega y pasión en las palabras, semánticamente cuidadas para lustrar la majestad del reino.  En dos oraciones resumió su conferencia:  (a) que un nuevo populismo se estaba apoderando de lo latinoamericano, irrumpiendo contra la institucionalidad establecida [de corte neoliberal], como la propiedad privada, la empresa privada y la pobre costumbre de que el Estado intervenga en los asuntos del mercado; y (b) que semejante corriente (o "espectro, como él dice) procura así quebrar con el "sistema interamericano", creando una institucionalidad, excluyente de "Norteamérica", como una nueva OEA, un Banco del Sur, un Alba y otros nuevos conceptos de defensa (1).

Su certificación como nuevo Capitán General para América Latina la obtiene precisamente mediante la última vía dialéctica, cuando mueve el árbol de las viejas glorias de los EEUU en su lucha contra el comunismo o la corriente socialista del mundo, aparentemente victoriosa por legados como el del exterminador presidente Ronald Reagan, la caída del Muro de Berlín y de la URSS misma, el reformismo en la sociedad China y la certificación final, académicamente brillante, de Francis Fukuyama, con su libro El fin de la historia y el último hombre.  De forma que el "espectro neo-populista" que invoca el ministro Santos viene a traducirse en algo así como una invitación a retomar viejas batallas ideológicas, con aires de Guerra Fría, contra el nuevo fantasma del comunismo, a sabiendas de que no es tal, de que es fundamentalmente el ejercicio del espíritu integracionista bolivariano, con específica coincidencia humanista e ideológica.

Pero a él no le importa, al ministro Santos, porque él, a fuer de su condición mantuana añejada en el tiempo, no puede darse la libertad intelectual de pensar de otro modo (dígame eso: un revolucionario buen burgués), debiéndose a su estirpe y estampa, a su espíritu templado en el yunque de aquello que no muta.  Como la imagen de una vieja estampa pegada en un libro, como una página de esas de García Márquez, donde es inevitable que "el olor de las almendras amargas le recordaba siempre el destino", perdiéndose luego la historia en el pasado de los tiempos.  La anacronía intelectual de semejante personaje no se avergüenza porque los mismos a quienes lame las botas de la adulación utilicen nuevos tecnicismos para intentar aplacar esos nuevos brotes de cambio en América Latina; y tales tecnicismos son narcotráfico, terrorismo, narco-guerrilla, autocracia, dictadura, derechos humanos, libertad de prensa.  No le importa; su preocupación es combatir como a su naturaleza se le ha enseñado:  matando invisibles fantasmas comunistas de la Guerra Fría.

Pero para el caso, a los efectos de obtener la patente de corso norteamericana, es suficiente con su entrega, no valiendo tanto los medios como los fines.   ¿No lo cree usted?  ¿No le parece que el hombre ya se ha posicionado, gobernando ya realmente en Colombia, a despecho ahora del pobre Uribe, quien se siente como tibio condón utilizado?  El ministro presidente, pues, pero presidente hasta el punto que, si hubiera la certeza de que cualquier otra opción "inconveniente" tomara el poder en Colombia, no tendría reparos algunos en dar un golpe de Estado, con anuencia de la única OEA a la que reconoce, los EEUU.

Mírelo usted en tres puntos:  (a)  Santos bombardea y mata en Ecuador, en una operación donde intervienen Francia, Israel y EEUU, y el presidente Uribe se entera del operativo (en su carácter de facto, no de pensamiento) por la misma prensa propiedad de su Ministro de la Defensa; (b) Uribe y Chávez conversan para reestablecer relaciones, y el ministro Santos, no bien su presidente ha arribado al país, torpedea los acuerdos del encuentro; (c) Santos propone condiciones para que su país ingrese en el nuevo Consejo de Defensa Suramericano que se implementa en la actualidad, cual presidente elegido con el poder delegado de su pueblo.  Al respecto, de Uribe dijo que estaba de acuerdo, porque ya le había manifestado las mismas exigencias al presidente del Brasil, Luda da Silva, en un tiempo pasado (2).

La tesis de Gaitán

De manera que bajo la presente óptica, Álvaro Uribe luce desarticulado, para no decir "acabado", utilizando la expresión a propósito de su aparato parapolítico en desbancada hoy.  Los servicios a la República ya los rindió, debiendo menguar para que otra estrella brille.  Aparentemente liquidada la guerrilla, como luce (a menos que ésta intente algo, "favoreciendo" a Uribe), su papel luce fuera de lugar, contraproducente incluso por los ahora molestos parapolíticos que a cada rato se asoman a la ventana de los medios de comunicación a contar un escándalo.

"Para los efectos revolucionarios, aquellos que aspiran a por lo menos equilibrar la distribución de la riqueza en un país, no pesa tanto que la obra de Álvaro Uribe haya sido la desarticulación de la guerra de guerrillas en el país como sí el retorno cabal y abierto del sistema político de castas. "

Nada más inconveniente en tiempos de siega.  Es hora de la recolecta, pues, y la araña mantuana de los tiempos en Colombia, se dispone a asumir el mando de un país "pacificado" en la figura del nuevo delfín de las también nuevas circunstancias históricas.  Delfín de la misma especie, santo y seña, abolengo de una clase que despide olores a subterráneos ya, para hablar de hechos sedimentados.  No como Uribe, que se retira iracundo de complejos, de hombre pequeñito con ínfulas de grandeza, como la grandeza de los "pequeños" que el mundo ha tenido, como Napoleón Bonaparte o Simón Bolívar, quienes sin problemas arrasaron con el sistema de castas de su tiempo.  Pero en el caso de Uribe, abogado aburguesado de la clase media, proyectado al poder en virtud de sus maniobras narcoparapolíticas, ninguna de sus estaturas fue suficiente para doblar la cérviz de la severa oligarquía de su país, quien no lo consiente ni en las más modestas baldosas que pisa.  Lo utilizan, como ya lo hicieron; y el paisa desde hace rato ya se había dado por resentido.

De forma que el pequeñin se va con el sabor del uso en la boca, bajo el efecto preservativo −puede decirse, para usar una imagen de Hugo Chávez−, sintiendo inútil todo el poderío acumulado para abatir al monstruo de las mil cabezas que le cerró el paso a su definitiva consagración megalómana.  Como en los EEUU, en Colombia manda un sistema −y no precisamente democrático−; no una persona.  Como allá, los presidentes son cartas jugadas en la mesa de las circunstancias.

Para los efectos revolucionarios, aquellos que aspiran a por lo menos equilibrar la distribución de la riqueza en un país, no pesa tanto que la obra de Álvaro Uribe haya sido la desarticulación de la guerra de guerrillas en el país como sí el retorno cabal y abierto del sistema político de castas.  El apogeo. La extrema derecha en ejercicio pleno, sobre un pueblo domeñado ("pacificado")  y el espíritu gaitanista aderezado en un rincón como hecho histórico, listo para los libros de historia.  Cosa grave, por cierto, sólo rescatable por una lucha ardua desde el interior del monstruo mismo, con sus mismas herramientas "democráticas" y discursos acartonados sobre el progreso y las humanas estirpes.  (Un Hugo Chávez o un Salvador Allende para Colombia). Difícil situación que no debe dejar de inspirar a los poetas políticos que requiere la patria para alcanzar un poco más de justicia.

Bien lo decía la hija de Gaitán cuando razonaba que a Uribe le buscaban el sustituto; aunque, desde mucho antes, lo apuntaba ya el periodista José Vicente Rangel en Venezuela, cuando también razonaba sobre la hora política llegada de Juan Manuel Santos (3).  Es tan cierto así que a Uribe no le vale ni siquiera la argucia de tratar de utilizar a Chávez −en el supuesto de la pretensión− para sacarlo del camino.  Las recientes recriminaciones del presidente venezolano contra el altanero Ministro de la Defensa colombiano, ha debido alegrar el corazón del triste abogado de las causas perdidas..

¿Colombia en el Consejo de Defensa Suramericano?

Para terminar, recuérdese la última travesura de tan atrabiliario don.  Exige las siguientes condiciones para que su país ingrese en el Consejo de Defensa de Suramérica, a saber:  que todas las decisiones se tomen por consenso, que se le permita a sus miembros la libre asociación con otros consejos de defensa de otras regiones (incluyendo a Norteamérica y sus amados EEUU) y que no se reconozcan a los "grupos armados ilegales".  La más perfecta proposición de Caballo de Troya jamás oída, artera movida política que quiere aprovecharse de la onda integracionista de buena voluntad que cunde en América Latina.  Un simple acto ruin.

Ni más ni menos unos EEUU presentes de modo indirecto en el seno de las decisiones, que jamás acordarán nada sin en medio del consenso pactado Colombia vota de forma contraria al espíritu comunitario.  Un vaso comunicante de la traición será Colombia cuando en su condición de doble filo sirva a otro consejo de defensa que busca la ruina de la integración.  Una oda a la estupidez su aceptación, tanto peor si quien hizo la petición por Colombia fue su Ministro de la Defensa, quien esboza en el acto los lineamientos estratégicos que le dictan desde ya y que en breve habrán de definir su política de Estado, en la eventualidad de alcanzar la presidencia de su satélite país imperial.

Como se describió arriba, el ministro Santos viene contra el espíritu integrador que vive América Latina,  contra el bolivarianismo; pero con ínfulas de glorias viejas, como hombre de la Guerra Fría, caza-comunistas del siglo XXI al que amenazan su propiedad privada, cómo él entiende es la vida, una permanente estampa en el tiempo que se afana por sí misma.  Lo demás es discurso.  Si la doctrina bolivariana coincide en un postulado socialista con el humanismo marxista, tanto peor para la doctrina y tanto mejor para sus propios argumentos clasistas (los del ministro).  Tal bolivarianismo no es más que un comunismo disfrazado, como el mismo lo conceptuara  en su conferencia en Washington:  "una versión degenerada [del comunismo] que podríamos definir como un espectro neo-populista, pseudo-socialista y autocrático" (4). 

Notas:

(1) Véase el comentario de la conferencia por parte del presidente venezolano en "Chávez analiza discurso de Juan Manuel Santos y lo acusa de buscar un conflicto en la región" [en línea].  En YVKE Mundial. - 15 mayo 2008. - [Pantallas 1-3]. - http://www.radiomundial.com.ve/yvke/noticia.php?5805. - [Consulta:  26 jul 2008].
(2)  Lo concerniente al último punto sobre Consejo de Defensa Suramericano puede apreciarse en "Condiciones de Colombia para ingresar a Consejo de Defensa Suramericana" [en línea].  En Aporrea.org. - 24 mayo 2008. -  [única pantalla]. - http://www.aporrea.org/actualidad/n117558.html. - [Consulta:  26 jul 2008].
(3) Gloria Gaitán:  "Le buscan reemplazo a Uribe" [en línea].  En Aporrea.org. - 13 jul 2008. - [5 pantallas]. - http://www.aporrea.org/internacionales/a60416.html. - [Consulta:  26 jul 2008].  José Vicente Rangel desde mayo ya se había hecho con la afirmación de que Santos es el nuevo santo de poder en Colombia:  "José Vicente Hoy / Los Confidenciales / Intentos golpistas se mantienen" [en línea].  En Aporrea.org. - 11 mayo 2008. - [pantalla 4]. - http://www.aporrea.org/actualidad/a56761.html. - [Consulta:  26 mayo 2008].  Puede complementar el tema con Oscar J. Camero:  "Álvaro Uribe en fuga" [en línea].  En Animal político. - 12 mayo 2008. - [13 pantallas]. - http://zoopolitico.blogspot.com/2008/05/lvaro-uribe-cado.html. - [Consulta:  26 jul 2008].
(4) "Chávez analiza [...]", [pantalla 2].

Postdata:  el siguiente video, correspondiente al Alo Presidente del 27 de jul de 2008, recoge las apreciaciones de Hugo Chávez sobre el Ministro de la Defensa de Colombia, catalogándolo como nocivo para la unidad, figura hostil para Suramérica:  Video Juan Manuel Santos

jueves, 24 de julio de 2008

Primer Año de Animal Político

Este blog se inició un día como hoy, hace un año.  Inicialmente su propósito fue escribir pequeñas notas políticas sobre el acontecer venezolano, pero al tiempo se definió como un documento con ínfulas un poquitín más extensas, como lo es el ensayo político (o algo parecido).  Su antecedente inmediato fue Mi palabra por delante, blog cuya mayor razón de abandono fue el nombre mismo, extenso y poco explícito.

Hoy Animal político encarna en Tips políticos de Venezuela, su blog auxiliar, esa intención inicial de escribir pequeñas notas políticas.

Esta nota se publica de modo programado en el editor de blogger (al menos fue la intención, porque no funcionó y guardé el post por ahí), a modo de recordatorio del primer año de vida.  Para este primer año, el blog rondó los 256 artículo, más de cien de ellos publicados en el portal Aporrea.org, creo que uno en Rebelión y tantos otros muchos que los lectores pegan en diversa páginas, como Indymedia Colombia, foros de Noticias 24 y Noticiero Digital,  en algunas páginas electrónicas de diarios nacionales o extranjeros, blog personales, etc.  Algunos de sus artículos han sido traducidos al francés, por responsables personas que me han pedido el permiso.  Otros tantos, sencillamente plagiados del modo más deportivo.  (Algunos toman un artículo y lo pegan en otros portales bajo su autoría). Aquí nadie se molesta por ello, mientras el mensaje se difunda por los cuatro costados. El conocimiento o la información, como en épocas pasadas, no es ningún arcano. Además… ¿conocemos algún marco legal que pueda hacer algo al respecto? Casi todos los días veo blogs por ahí ejerciendo el deporte de llamar al asesinato de alguién, especialmente en contra de la persona del Presidente de la República. Si lo hay, no se ejerce.

En fin, quizás un poco más esperanzado por aumentar sus lecturas (se escribe para ser leído)*, Animal político en general autovalora sus modestas marcas, aprestándose a superarlas en el nuevo año de vida que empieza, pero no desde el reto estadístico, puramente, sino como una certificación de que se sigue trabajado sostenidamente para mantener niveles de dedicación .  Humildemente expresa que su aspiración es llevar una antorcha de reflexión o de aclaratorias en materia política al lector que llegue a él, cosa que en la red, con tantas bitácoras sobre el tema, es de dificil consecución de manera exclusiva o por lo menos en condición de primacía.  Se alegra de que, por lo menos, fuera de dos parientes, lo lean dos o tres paisanos pero de modo asiduo.

El autor quiere dejar la siguiente nota:  en general se escribe para ser leído, de modo que el autor de un blog, con todo lo que de herramienta catártica encarne en él, tiene también que convertirse en una suerte de agente de mercadeo de sus propios escritos, so pena de no realzar su volumen y pasar desapercibido, más incluso si lo que escribe no es sensacionalista.  En este sentido, el blog todavía explora técnicas para difundir un poco más sus contenidos, no siendo muy ducho en semejante arte, como tanto otros blogs por ahí que saben difundir sus escritos, muchos de ellos hasta haciendo trampas con la exposición de fotografías pornográficas, sin ser el tema su especialidad.  Sin duda el poder de atracción de una página radica en la calidad de sus contenidos, pero es un hecho también que la parte formal de la técnica difusora vale un mundo a la hora de hacer rebotar su actualización en la red.

Animal político agradece a sus lectores −si los hay por ahí− que le  hayan permitido existir, feliz de estar vivo en el camino hacia su segundo año.

Con un saludo afectuoso y revolucionario, por la patria y el pueblo, en este Natalicio de El Libertador,

atentamente

Oscar J. Camero

Nota:
* Bueno, Ernesto Sábado dice en el Escritor y sus fantasmas que auténticamente debería escribirse no para otros, sino para uno mismo, para liquidar necesidades expresivas.


miércoles, 23 de julio de 2008

Poder militar y humanismo, a propósito del almirante Mike Mullen, Jefe del Estado Mayor Conjunto de los EEUU y su guerra contra el mundo

Imagen tomada de Join Chiefs of Staff En estos momentos estoy bajo los efectos de la sorpresa.  Estoy impactado, para balbucear.  El almirante Mike Mullen, Jefe del Estado Mayor Conjunto de los EEUU, dice consternado que no necesita otra guerra, porque en la actualidad está peleando dos (¿habrá que creerle en su preocupación?).  Que se parte en dos hacia Afganistán e Irak, y que no cree que pueda hacerlo en tres con la propuesta ahora de una guerra con Irán, aunque no duda que su país pueda sortearlo  sin problema alguno, esto es, acometer tres guerras al mismo tiempo.¹

El problema es él, sus sentimientos, limitado ser humano incapaz de coordinar mayor cantidad de aniquilaciones en el mundo.  Gran drama humano, de alcance ecuménico, se dirá, probablemente similar al drama ontológico de Hamlet:  ¿ser o no ser?

Sus superiores probablemente se conduelan con sus tristezas y a lo mejor le aumenten el sueldo, para estimularlo.  Quizás surja una voz preñada de positivas esperanzas para su futuro y lo convenza de afrontar el tercer reto.  El es humano, lo máximo de la especie animal, con billones de neuronas que no llegan a utilizarse ni en un 10% a lo largo de una vida.  ¡Tú puedes, Mike!  ¡Adelante!  Y le suelte luego esa voz que podría ser nominado políticamente a algo, tal vez a vicepresidente de los EEUU o a otro puesto de relevancia universal.  Como ya ocurrió con el general Colin Powell, negrito él, sin embargo disparado a los confines del cielo. ¡Qué no ocurrirá con él que…!

El almirante habla de inestabilidad en la región del Medio Oriente, y dice preocuparle.  Expone que puede haber consecuencias imprevistas, sumido en un estado parecido a la depresión.  Se reúne con los periodistas y se lo manifiesta, y muchos hay por ahí que se desgañitan por perfilarlo como hombre tierno, padre de familia, lleno de humanidad él, sin dormir por el acaecer del mundo y su paz; otros, no le creen, y se imaginan que sus palabras son un simple bombo personal para revalorizar ante el mundo su nunca vista posición de general peleando tres guerras.  Ni Napoleón, ni Bolívar, ni Julio César.  Podría decirse que la historia militar puede empezar de cero, con él.

El es un soldado universal, de esos que aprisionan el mundo en un puño, sintiendo todos sus latidos.  El soldado de la globalización, full contemporáneo.  Su poder es proporcional a su capacidad, y por ello es que desde el Pentágono le piden que no se limite, que acopie entusiasmo y decisión para avanzar.  La hora de su estrella ha llegado, y por eso es que -seguramente- lo han enviado a los medios de comunicación a exponer su drama humanitario.

Ello perfila a los EEUU, ansiosos por saber si son capaces de soportar cada vez más a un tiempo múltiples guerras en el mundo.  Saber si pueden enfrentarse al mundo, como lo propala ya la imaginería de los juegos informáticos cuando te ofrecen esa modalidad de combate:  "EEUU contra el mundo".  O como ya ha ocurrido en uno que otro evento deportivo, donde el equipo nacional X a sitiado uno a uno a los combatientes del universo.

Pero también sirve el almirante en las pantallas para incrustar ante la opinión pública que no se es del todo un militar, cuyo aprendizaje es la muerte, sino una entidad con sentimientos capaz de albergar piedad.  Y ello enternece, hasta el grado que puede animar a la opinión pública a apoyar la guerra.  "Sí, está demostrado, son tremendos seres humanos; hagan la guerra".  Y por ahí se va el cuento.

Y el cuento es ese, simplemente:  se va a la guerra.  El almirante Mullen lo sabe, y el pone su grano de arena sentimental.  Porque las guerras de hoy se apalancan demasiado en esforzarse cómo pensará la opinión pública, como primer cometido.  Naturalmente, el cometido de fondo es la destrucción para tomar una plaza.  Pero debe ser disimulado, limado en sus aristas homicidas, en concordancia con las formas civilizatorias de la sociedad occidental.  No se puede andar diciendo por allí que morirán niños iraníes en cantidades de cientos cuando una bomba alcance una escuela.  Es una barbaridad, por más que se conceptúe como daño colateral.

Por eso es que el almirante Mullen toma la palabra y expone su drama humano.  Ello glorifica la actitud genocida de un guerrero, o por lo menos la suaviza, como cuando Héctor homicida se quitó el casco de guerra para no asustar a su hijo, allá en la Guerra de Troya, ante de morir con Aquiles. Y es un primer paso.  Ya vendrá lo siguiente, esto es, exponerle al mundo lo monstruoso que son los enemigos, bichos raros que ahorcan gente y les amputan manos cuando roban un pan.  O que poseen bombas atómicas; o que son terroristas, o narcotraficantes (tesis para América Latina), el argumento según el lugar.  Porque la guerra es un esquema, sí, hasta un protocolo.  Sea moderna o antigua.

"Pero como sea, es un hecho que tendremos que contar con el ejercito y la cultura de los EEUU a futuro como los pilares fundamentales para determinar qué es bueno y qué es malo sobre la faz de la tierra, para erradicarlo, séase terrorista, comunista, narcotraficante, tiráno, dictador, antidemócrata... o dueño de reservas fósiles o naturales."

El esquema guerrero de los EEUU es simple:

(1) Se debe hacer una campaña de glorificación sentimental, donde los que matan no parezcan asesinos. Así puede ocurrir que un presidente visite al Papa antes de iniciar una guerra.

(2) Se debe satanizar al enemigo, acusándolo gravemente de algo que paralice a cualquiera en defenderlo.  Así, al matarlos, se da la impresión de que se lucha por libertad o cualquier otro concepto ennoblecido.

(3) El enemigo debe ser un objetivo fácil, porque no se puede rasguñar la autoestima de la potencia militar de todos los tiempos. La palabra Vietnam o Cuba deben ser borradas del diccionario.

(4) El enemigo debe estar en el contexto de unos vecinos capaces de traicionarlo, porque así ellos, los EEUU, aplican la máxima maquiavélica de dividir para vencer. El Medio Oriente es “pan comido”, dado el acicalamiento que hacen de las “tres fuerzas que de manera tradicional han amenazado la estabilidad en los países de Medio Oriente: el sectarismo, el caudillismo y la mentalidad tribal”.²

(5) El enemigo debe ser dueño de "algo" que se necesita.  No se hacen guerras por baratijas, más si quien las promueve es el principal propulsor del capitalismo en el mundo.

Luego, tomando en cuenta el rezo del último punto, la guerra es inevitable, aunque Barack Obama ande hoy pisando la tierra donde sus coterráneos hacen la guerra.  Ese no es su problema.  No puede hacer nada, ni como candidato ni como presidente.  Su lugar en la Casa Blanca -como el de cualquier presidente norteamericano- es fingir que no beneficia a unas minorías dueñas de las transnacionales, como hace Bush con sus amigos petroleros.  Y de Irak medran las minoritarias clases de poder económico de los EEUU, hoy transnacionalizadas empresas del mundo.  Explotación del petróleo, reconstrucción del país en medio de la guerra, división geográfica y étnica de los nativos, medios de información retratando como flores los cuerpos mutilados.  Todo es oro en los negocios...

Si se considera nada más que desde 1957 Eisenhower promulgó una doctrina de aseguramiento de las reservas petroleras del Medio Oriente, se tiene bastante para sacar la cuenta de cuánto se ha gastado en la región.  No se puede abandonar así como así.  Hay que recuperar.  Y lo que hizo luego Carter lo confirmó, 1980:  la ocupación estratégica, virtual, como sea, se tiene que mantener, para proteger el flujo del oro negro hacia los EEUU.   Y lo que hizo luego Reagan cuando fundó el Central Command (Centcom), para ayudar humanitariamente, luchar contra el terrorismo (en su gérmen) y proteger el mismo flujo petrolero.  Y lo que hizo luego Bush con su doctrina de "guerra contra el terrorismo" y los "estados canallas".³

Es una predeterminación.  Tanto así que la figura del Medio Oriente, con un Israel delegado para gobernarlo, a modo de Capitanía General de la era colonial en la era informática, quiere pelearse con América Latina en eso que se llama el "patio trasero".  EEUU considera al Medio Oriente de su propiedad, un macetero en su jardín o grano en su despensa. De cualquier modo.  No se le quita ni se le abandona sin guerrear.

Cuando el compungido almirante se lamenta de la inestabilidad de esa parte del mundo, partera segura de inesperadas situaciones, no se refiere ni por un momento al Medio Oriente como tal, como zona con humanos acuciada por la muerte y la guerra.  Nada que ver.  El hombre llora desde sus lágrimas, no desde las ajenas.    Se refiere a la novedosa situación de que su país peleé las tres guerras a una vez, pudiendo ello salirse de control, con desmedro para la moral imperial, para la tropa, para la dignidad de la primera potencia mundial.  Alguna varianble no controlada que pueda humillar, como la derrota desde los tiempos del Vietnam.  Algún grado de dificultad que pueda comportar la no vista configuración única de tres débiles enemigos en batalla.

No otra cosa.  Su oración sobre la inestabilidad dibuja a los mandos gringos en apuros.  No más.  Pero ya lo sabemos; hay que saber interpretar y leer entre líneas.  No se trataba de ninguna soberbia personal, sino corporativa, nacional.  Me equivoqué desde el principio con él, al pelearme con su humanidad.  (¿Cómo le ocurre a uno eso?) En verdad es sincero, en su plano personal.  Quizás hasta sea temeroso de la Palabra, él, el señor Muller, y tema aquello que el dios hebreo dijo:  "Mas la persona que hiciere algo con soberbia, así el natural como el extranjero, ultraja a Jehová; esa persona será cortada de en medio de su pueblo" (Núm 15:30-1).

Pero como sea, es un hecho que tendremos que contar con el ejercito y la cultura de los EEUU a futuro como los pilares fundamentales para determinar qué es bueno y qué es malo sobre la faz de la tierra, para erradicarlo, séase terrorista, comunista, narcotraficante, tiráno, dictador, antidemócrata... o dueño de reservas fósiles o naturales.  Convertir un tema en un argumento pecaminoso es una cuestión de prensa, de matrices de opinión, de medios de comunicación, de poder mediático.  Venezuela puede llegar a ser maligna por albergar las mayores reservas de petróleo. Quizás a futuro funde el gran país en su seno un Centro Eugenésico para la Libertad del Mundo, de donde emanen políticas liberadoras de todo lo inconveniente a lo humano terrestre. Desde donde se erradique, en nombre de la paz y la libertad del mundo, cuando no de la sanidad

Notas:

¹ "Jefe de Estado Mayor de EEUU:  ataque a Irán me preocupa demasiado" en Aporrea.org [en línea].  21 jul 2008.  Pág.:  1 pantalla. - http://www.aporrea.org/internacionales/n117313.html. - (Consulta:  23 jul 2008).

² Noam Chomsky: “Petroleras en Irak, pacto con el diablo” en Aporrea.org [en línea]. 21 jul 2008. Págs.: 6 pantallas. - http://www.aporrea.org/internacionales/a60803.html. - (Consulta: 23 jul 2008).

³ Michael T. Clare:  "La nueva geopolítica de la energía" en Colombia.Indymedia.org [en línea].  11 mayo 2008.  Pág.:  3 pantallas. - http://colombia.indymedia.org/news/2008/05/86487.php. - (Consulta 23 jul 2008).

martes, 22 de julio de 2008

La página de la competencia electoral. Elecciones regionales noviembre 2008

A continuación la prensa y los analistas, con proyecciones que tomo al vuelo y consigno aquí. Si hay contradicciones, es la de ellos, matándose solitos a sí mismos (esto nos lo enseñó Manuel Rosales). Decimos lo que leemos. Citamos incluso fuentes desacreditadas de datos como... (vea la referencia en el post de Tips políticos), si fuera el caso que se atreviera a dar pronósticos para esta contienda política. En fin, nos interesa notar cómo es que se da el desbarajuste de los cálculos y de las encuestadoras, pudiendo mezclar en el ínterin gente seria con terroristas de la información. La relación de notas no es exhaustiva, sino casual, destacando las perlas que se ofrezcan a la vista de quien escribe.

Texto en orden cronológico, con un epígrafe temático (Cuatro líneas en negrita máximo, y luego texto extendido (en claras), si es necesario)

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18 nov 2.008:  Bolívar y Mérida:  De acuerdo con el Instituto Venezolano de Análisis de Datos (IVAD), de Félix Séijas, el chavismo gana las gobernaciones de Bolívar y Mérida, estados con escenarios políticos polarizados.  En Bolívar, con Francisco Rangel Gómez y su 40,1% sobre el 30,1% de Andrés Velásquez, y en Mérida con Marcos Diaz, con un 47,6% sobre el 22,3% de William Dávila.

16 nov 2008:  El país:  Estados con triunfo chavista más holgados y estados con mayores posibilidad de derrota chavista, según Datanálisis e IVAD:  Lara, Vargas, Apure, Falcón, Anzoátegui, Portuguesa, Aragua, Trujillo, Monagas y Cojedes (triunfo holgado); Zulia, Nueva Esparta, Carabobo, Sucre, Barinas (con más probabilidad de derrota).  Fuente original:  Eleazar Díaz Rangel:  "9 factores electorales".

9 nov 2008:  El país:  José Vicente Rangel le da a la oposición tres gobernaciones, a lo sumo.  Ver información original en http://aporrea.org/actualidad/n123746.html

2 nov 2008:  Aragua:  Rafael Isea, según sondeos del Instituto Venezolano de Análisis de Datos (IVAD), la encuestadora más sería del país, tiene una intención de voto de 49%, contra un un 30,5% de Henry Rosales, en la lucha electoral por la gobernación de Aragua.  Vea la información en http://www.aporrea.org/actualidad/n123344.html.

27 oct 2008:  Zulia y Portuguesa:  La encuestadora PML Consultores da al candidato a la gobernación del Zulia, Gian Carlo Di Martino un 54,1% de preferencia electoral sobre un 36,1% de Pablo Pérez; en Portuguesa puntea con un 46% Wilmer Castro Soteldo, también candidato del PSUV, por encima de Jóvito Villegas, que llega a un 17%, según Venezolana de Estudio de Opinión (Veneopsa).

21 oct 2008:  El país:  Teodoro Petkoff da una conferencia en la Escuela de Ciencias Sociales de la Universidad de Chicago, y afirma que la oposición venezolana, a lo más, obtendrá 4 gobernaciones y como 100 alcaldías en los próximos comicios electorales de 23 de noviembre.  Opinó que es fantasía obtener más.

20 oct 2008:  Chacao:  En Chacao la oposición buscó su candidato unitario a tráves de popular, y los resultados favorecieron a Emilio Graterón como aspirante a la Alcaldía del Municipio:  76%, es decir, 4.884 votos de 6.423; le siguieron Ramón Muchacho, de Primero Justicia, con casi mil; y Liliana Hernández, de UNT, con casi 500.

1 oct 2008:  Alcaldías:  Para Germán Campos, directivo de Consultores 30.11, son irreversibles las victorias de Aristóbulo Istúriz en la Alcaldía Mayor y de Jorge Rodríguez en la de Libertador, teniendo el opositor Emilio Graterón la primera opción en Chacao.  Vea más detalles.

28 sep 2008:  Aragua:  De acuerdo con el IVAD, de Félix Seijas, según muestra escuestadora comprendida entre el 1 y el 14 septiembre, Rafael Isea se impondría con un 49,3%, llegando Henry Rosales a 27%.  Vea la nota en Los Confidenciales de José Vicente Rangel.

26 sep 2008:  El país:  Sigue Miguel Salazar dándole 11 plazas al gobierno y 4 a la oposición, además de presentar 6 gobernaciones empatadas.  Las pérdidas para el gobierno son:  Nueva Esparta, Barinas, Portuguesa y ... (?) ; y las plazas empatadas:  Bolívar, Guárico, Zulia, Yaracuy, Aragua, Carabobo.  (Las Verdades de Miguel. - (2008) 26 sep-2 oct; últ. pág.)

12 sep 2008:  Guárico:  Con una muestra concluyente al 1 de septiembre, Seijas nos presenta a un William Lara imponiendose sobre cualquier concepto:   en respuesta espontánea a la consulta, por lista y en escenario, apareciendo más amenazado por Lenny Manuitt (8 puntos de ventaja) en el supuesto que le toque solo competir con ella por la gobernación.

12 sep 2008:  Alcaldía Mayor:  Bueno, es una nota retrasada, pero hay que destacar que se reedita el otrora enfrentamiento entre Isturiz y Ledezma por la Alcaldía caraqueña.  Ledezma obtuvo el oficio opositor para hacerlo, quedándo pendiénte que declinen García y ...  Ya Ojeda lo hizo, por la "democracia".

12 sep 2008:  Carabobo:  "Nuestros sondeos dan un final cerrado entre Acosta y Salas Feo, cualquiera de los dos será el ganador, bien lejos sin duda del candidato del gobierno" (Raúl Bosque:  "Una comunicación errada lleva a la derrota en Barinas y Carabobo", Las Verdades de Miguel, sep 12-18, p. 6)

22 ago 2008:  El país:  Si las elecciones fueran hoy, el gobierno perdería con la oposición Aragua, Nueva Esparta y Sucre, y Carabobo, Guárico y Portuguesa con los disidentes del mismo partido.  (Miguel Salazar en Las Verdades de Miguel, ago 22-8, última página).

19 ago 2008:  El país:  Según la encuestadora Consultores 30-11, los seguidores del presidente Chávez se impondrán en 19 de los 22 estados, quedando tres bajo complicación, a saber:  Nueva Esparta, Sucre y Carabobo.

19 ago 2008:  Yaracuy:  La fracción opositora de Copei y Un Nuevo Tiempo decidió apoyar al prófugo Eduardo Lapi como candidato a la gobernación por encima del alcalde del municipio Cocorote, Edward Capdevielle, quien está apoyado por el MAS, Podemos y Primero Justicia.  Capdevielle, en general, parecía gozar de mayor aceptación entre el bloque opositor.  Más división opositora y, esta vez, en aras de una situación turbia, como lo es el apoyo al cuestionado ex-gobernador. 

19 ago 2008: El país: Bolivar, Táchira y Alcaldía Mayor mantienen todavía en discusiones a la oposición venezolana (Ultimas noticias, 19 ago 2008)

17 ago 2008:  Zulia, Municipio San Francisco:  Al precandidato opositor al municipio, Saadi Bijani, un directivo de televisión le dijo que retirara su candidatura porque ya la decisión había sido tomada; que le cortarían los recursos financieros y que si no aceptaba debía atenerse a las consecuencias.  (Vea a José Vicente y sus Confidenciales)

14 ago 2008: El país: La oposición informa un casi completo acuerdo respecto a los candidatos, teniendo diferencias nomás en Bolívar, Miranda, Táchira y Yaracuy; pero al cierre del plazo de las inscripciones, cantidad de candidatos manifestaron continuar con sus postulaciones, no aceptando imposición de cogollos. Continúa el zaperoco que los caracteriza.

8 ago 2008:  Guárico:  "Reinaldo Armas subió tres puntos y puntea las mediciones.  todo indica que polarizará con Willíam Lara al final de la campaña, porque Lenys Manuitt baja.  El problema para el cantautor es si acepta el apoyo de Manuitt y la repercusión que eso tenga."  (J.A. Almenar en Quinto Día, ago 8-15, última pag.)

7 ago 2008: El país: La encuestadora Hinterenlaces le da cuatro gobernaciones a la oposición, con amenaza de pérdida en Zulia; tales son: Bolívar, Sucre, Carabobo y Táchira. Afirma, además, que de 11 gobernaciones que tenía la oposición con ventaja sobre el gobierno sólo le quedan estas, por causa de sus ambiciones personalistas.

7 ago 2008: Caracas: Al quedar fuera de combate Leopoldo López, por inhabilitado, Ismael "Podemos" García, se ofrece como candidato a la Alcaldía Mayor, aunque los adecos desistieron de apoyarlo para jugársela con el segundo mejor rankeado después del alcalde de Chacao: Antonio Ledezma.

3 ago 2008: El país: Si las elecciones fueran hoy domingo, el gobierno perdería en Carabobo, Nueva Esparta, Zulia y Sucre (J.A. Almenar en Quinto Día, ago 1-8, última pag.)

3 ago 2008: Anzoátegui: Tarek William Saab espera sobrado con un 62,1% de aceptación a su rival opositor, todavía en veremos, dado el bochinche opositor de selección de los candidatos. (Ver encuesta IVAD)

31 jul 2008: Oposición: Tres candidatos más acuerda la oposición, llegando a 13: Reinaldo Armar (Guárico), Henry Rosales (Aragua) y Antonio Barreto Sira (por Anzóategui, si deja de estar inhabilidatado).

29 jul 2008: Oposición: En Guárico el MAS da otro ejemplo de "unidad" y despega a su candidato de los acuerdos de "unidad" opositora: Nicolas Sosa, ahora candidato por su tolda (http://www.aporrea.org/oposicion/n117754.html)

29 jul 2008: Chacao: Guerra en Chacao por la nominación: todos quieren ser alcaldes.

Liliana Hernández (UNT) quiere ser candidata y también Emilio Graterón (AD). Hoy la oposición hace gala de "entendimientos" al poner a estos gallos a pelearse por la nominación. (vea http://www.aporrea.org/oposicion/n117740.html y saque su cuenta). Los otros candidatos son: Leopoldo López (inhabilitado), Ramón Muchacho (Primero Justicia), Carlos Vecchio (Ciudadanía Activa) y Willian Torres (PSUV). Llamarán a Súmate para resolver el rollo.

26 jul 2008: Oposición: Con tres más, suman diez las gobernaciones acordades en la oposición

Es decir, Pedro Pablo Alcántara (UNT) para la Gobernación de Lara, Gregorio Graterol (Copei) para Falcón y Alberto Galíndez para Cojedes. [Diario el Mundo. - (2008) jul 26; p. 2]

25 jul 2008: Zulia y Falcón: Ganan Di Martino y doña Stela (pronóstico del "Brujito de Zumurucuare", Quinto Día, jul 25-ago 1, p. 19)

25 jul 2008: Falcón y Nueva Esparta: Dice el columnista J.A. Almenar (Quinto Día, jul 25-ago 1; p. última) que López Hidalgo no le gana a la señora Montilla por la gobernación de Falcón: "así lo diga la gente". Entre otras, afirma también que Morel Rodrígue en Nueva Esparta es una fija.

18 jul 2008: Nueva Esparta: aunque divididos, gana la oposición en los municipios Maneiro y Coche (Jose Gregorio Rodríguez: "Coctel de camarones" en Las Verdades de Miguel. - (2008) jul 18-24; p. 15).

18 jul 2008: Oposíción: El desorden organizativo opositor ha convertido la victoria en derrota:

"Sólo queda en el ambiente la nada agradable adevertencia que hiciera Luis Vicente León, de Datanalisis [...]: es demasiado tarde para la oposición, los 8 puntos de ventaja que en alguna gobernaciones tenían producto de la catástrofe oficialista del 2 de diciembre, se ha reducido a 0." (Esteba Ori: "Chávez o la oposición ¿quien gana en la polarización" en Las Verdades de Miguel. - (2008) jul 18-24; p. 10.

18 jul 2008: El país: Estos ganan en sus respectivos Estados:

Henry Falcón (Lara), José Briceño (Monagas), Tarek William (Anzoátegui), Diosdado Cabello (Miranda), Giancarlo Di Martino (Zulia), Stella Lugo (Falcón), Jesse Chacón (Alcaldía Sucre o Petare), Morel Rodríguez (Nueva Esparta), Henrique Salas Feo (Carabobo), Eduardo Morales (Sucre), Antonio Rojas Suárez (Bolívar), Julio Reyes (Barinas)

Fuente: Miguel Salazar en Las Verdades de Miguel (18-24 jul 2008)

El rayo de la Revolución Bolivariana

Imagen tomada de Pariendo la Patria Buena Al margen de tantas otras opiniones que lo colocan en una situación de capitulación ante el jamás imaginado poderío de las tropas estadounidense, hemos manifestado nuestra opinión de que el presidente venezolano, con sus últimas movidas de piezas, se ha replegado tácticamente, sin que ello signifique cese alguno en el proyecto de construcción de la llamada Patria Grande.  Opinar lo contrario es, en primer término, un ejercicio de libertad de opinión, luego un desconocimiento de la psicología de las masas de nuestros pueblos latinoamericanos (en nuestra opinión) y, finalmente, un reconocimiento desolador de que Hugo Chávez es un traidor, que se aprovechó de un discurso populista para engarzarse en el poder y cambiar luego santo y seña, como es la costumbre en muchos políticos sin compromiso ideológico.

El último de ellos fue Lucio Gutiérrez, presidente de Ecuador entre 2003 y 2005, y presidente de la Junta Gubernamental en el año 2000, luego de la deposición del presidente Jamil Mahuad.  Se construyó una imagen de redentor popular, utilizando los íconos a su alcance para ello, entre ellos el de Hugo Chávez, de quien se confesó admirador y a través de cuya vía publicitaria sumó votos para su campaña.  Llegado al poder, las mieles de la burguesía lo embriagaron y le birlaron capacidad y don mando en virtud de los profundos estados de borrachera moral a los que fue sometido.  Hoy milita en los jardines de la ultraderecha, desde donde sueña nuevamente con acceder al poder, ahora desprovisto del disfraz de lobo ovejuno, en su clara humanidad y condición ideológica.

Semejantes casos avergüenzan, porque no se descubren detrás de ellos solidez personal alguna, visos de una estructura ideológica definida, mucho menos que su proceder responda a una artera maquinación de supervivencia o estrategia políticas.  Jamás ilustran una situación de compromiso que no sea el de no tener ninguno y pertenecer al aire, a la nada, a todos y a ninguno a un tiempo.  No hay compromiso ni palabra de hombre, esa que se empeña y se cumple, como en un viejo caballero, y, como se sabe, quien en esta vida no asume compromisos o posiciones fundamentales, tiene únicamente la vida biológica, misma que puede tener cualquier especimen en la naturaleza.  Lo demás es circo.

En el caso de Hugo Chávez el asunto es simple.  Se es revolucionario, pero la condición doctrinaria y el compromiso moral no impiden −ni olvidan− que también se es político.  Un mundo de herramientas posee al alcance, para disponer de ellas y luchar contra el feroz contrario, en tiempos cuando lo que importa más es el estudio de la psicología de las masas.  Era Informática, para quien no esté avisado; mundo globalizado, para quien viva en una parcela que considere suya y alejada de la condición humana, perdida en la selva, por ejemplo.  Hacer uso de ellas, políticamente, es hacer vida política.  Y en el presidente venezolano, con sus conocidas y sorpresivas acciones de los últimos meses (FARC, reunión con Uribe y movidas internas en Venezuela), el efecto político no se puede catalogar de otro modo que no sea desconcierto.

Efecto paralizante, se dirá; situación que pone a reflexionar al contrario y a imaginarse nuevas armas para el ataque, si es que no entra en imaginaciones de que el líder del bolivarianismo se pueda pasar a sus filas.  En fin, un desconcierto, cuya mayor rentabilidad es la ganancia de tiempo, mismo que el presidente venezolano invierte en reorganizar sus filas, prepararse para afrontar una próxima medición electoral, idear mecanismos de contención para frenar la desesperación gringa de invadir Venezuela y tomar el ansiado petróleo, buscar alianzas, mantenerse a flote como político, evitando las matrices arteras de satanización internacional.  No perder vigencia, fuerzas, posición.  Continuar siendo el líder enigmático, que da pasos indescifrados, probablemente inspirados por la Providencia.

Hubo un tiempo en que el carácter corporativo −digámoslo así− de la gesta revolucionaria china amenazó con derivar hacia un fracaso, debiéndose implementar medidas de urgencia para no perder la "colocación" popular.  Ellas consistieron en utilizar la imagen del camarada Mao Tse Tung de modo más personal, de frente en la propaganda, sobre la psicología de las masas, en su perfil de soldado entregado al combate, sin avergonzamiento alguno por echar mano de un recurso político "burgués" para salvar la revolución.  Recurso, por cierto, nada perteneciente a nadie, patrimonio del saber humano.  Circunstancias del fuero político e ideológico que han de tapar los huecos de la incompleta educación −aún− de los pueblos.

Fidel Castro, como estratega, también hizo lo suyo.  Se valió de la altanería imperial para envolver a la potencia de los EEUU en un galimatías movimientos que al final derivó en la espectacular Crisis de los Misiles, que puso al país de norte en su lugar y aseguró, vía alianza circunstancial, la vigencia de la Revolución Cubana hasta nuestros días y para siempre. (Como dicen las mismas Escrituras, la soberbia pierde a las almas).  ¿Habrá que criticarle que se valiera de artimañas para vencer, porque un revolucionario no actúa así, no engaña al enemigo, le habla con franqueza y casi que le dice cuáles habrán de ser sus próximos planes de ataques?  ¡Pamplinas!  ¿Quién ha dicho que se ha traicionado nada?  La Revolución Cubana, como todas, es una circunstancia humana de vida o muerte, y a cualquier revolucionario, luego de poner en práctica todo el arsenal intelectual para vencer, no le queda otra salida que morir, si no puede finalmente, en el colmo de la desesperación humana, salvar sus ideas y posiciones.  En este sentido, cuando la muerte es un hecho y clara sentencia de los dioses, nadie puede afirmar, por ejemplo, que Ernesto Che Guevara no esté vivo.

"Los latinoamericanos son más astutos que poderosos militarmente.  No de otro modo se comprende que albergue a la guerrilla más vieja del mundo, haya vencido a las huestes colonizadoras de España con los más disímiles artilugios, haya vencido en proporción de 5:1 en numerosos combates (si no exagero), haya trascendido una Revolución Cubana, entre otros tantos íconos."

Los latinoamericanos son más astutos que poderosos, militarmente.  No de otro modo se comprende que albergue a la guerrilla más vieja del mundo, haya vencido a las huestes colonizadoras de España con los más disímiles artilugios, haya vencido en proporción de 5:1 en numerosos combates (si no exagero), haya trascendido una Revolución Cubana, entre otros tantos íconos.  Con imaginar que un lego como José Antonio Páez, el centauro llanero, haya logrado en una noche engañar al ejército español respecto al número de su pobre ejército, se tiene para pensar un rato:  una sarta de llaneros arrastrando unos cueros ruidosos en medio del enigma de la noche para sembrar la impresión de que eran cientos de miles, haciendo temblar al enemigo.  Hasta el mito de El Dorado entra en juego aquí, para ilustrar cómo, aprovechándose de la estupidez o apetencia del enemigo, se puede infligir golpes de mazo.  Nombre usted, estimado lector, los ejemplos restantes de cada pueblo, como los de Perú, México, Chile, Argentina.

Venir y afirmar que el hombre capitula por aquello de un postulado bélico denominado "unconditional surrender" (mi admiración por el profesor Heinz Dieterich),* aplicado hacia finales de la II Guerra Mundial, y que consistía en hacer que el enemigo se rindiera solo solito en virtud de comprender que estaba rebasado por la fuerza enemiga; me parece un excelente punto de cultura histórica, más no de pertinencia local en la psique nativa o criolla (mezcla que somos del mundo).  Quienes así razonan no parecen enclavarse dentro del espíritu de los tiempos latinoamericanos, por un rato pensando en los ejemplos vitales de hombres como Simón Bolívar, desprendido a más no poder de las "mieles de la vida" para sacrificar su vida por una idea que luego se convirtió en gesta.

Porque con todos los problemas, con todo y la apreciación de muchos de que nuestros pueblos no han cambiado de formato colonial, aunque sí de colonizador (EEUU por España), la Revolución Bolivariana anda por América Latina, hoy más viva que nunca, con todo y el dedo tapa-sol mediático.  La unidad de los pueblos es la proclama, y la independencia, el mandato de lucha.  Los latinoamericanos estamos aquí, con la certeza de que, contra invasiones o luchando contra el espíritu cortesano de las almas locales compradas por el extranjero, el modo de ser libre es un legado que jamás se acaba.

Se puede comprender que la desilusión del intelectual madure más rápido que la del hombre de las armas o de las estrategias, porque en el mundo de la imaginación y las palabras se crean realidades virtuales, placebos de recónditas aspiraciones, expresión de sueños acariciados.  Pero en el hombre práctico, amparado por la idea, el sabor de los hechos tiene otra catadura y proyecta otros cálculos, por otros denominadas maquinaciones.   ¿Quién puede culpar que un soñador o estudioso cualquiera se desespere con un proceso de cambios en curso que no doblegue de una vez por todas las barreras enemigas y haga florecer una situación plena de aspiraciones y sueños contenidos?  Más aun en América Latina, donde la presencia de los EEUU ha sido omnipresente y pareciera cuesta arriba deshacerse del yugo amenazante de su bota imperial.

Un Hugo Chávez embrutecido por su pertinacia radical ideológica, víctima fácil −en consecuencia− de las demoníacas campañas de satanización mediática, rectilíneo y predecible en su cultura política, mal expositor de una sagacidad revolucionaria; estaría hoy por hoy fuera de juego, como una ruina sobre el panorama de los cambios en América Latina, loco soñador con arrestos bolivarianos e iluminismo socializante.  Muy lejos, por cierto, del lugar donde está hoy, en Rusia, el otro polo de la fuerza militar en el mundo, hurgando la entraña del poder en el mundo para procurarle un manto de protección a Venezuela, base de los cambios en la América bolivariana.

Es el tiempo que una posición requiere para reforzarse, para crecer y extenderse hasta el poderío.  Es la alianza, el vaso comunicante de la geoestrategia contra el enemigo común.  No hace falta ser genio para saber que Venezuela puja hoy por una alianza −militar, si es posible− con Rusia, a efectos de desalentar intenciones guerreristas e interventoras.  Una idea que en muchos "colonos" habrá de sonar descabellada, por aquello de considerar a su metrópolis invencible (EEUU); pero que no deja de ser lógica desde el plano de las estrategias y la consideración psicológica de que quien encarna las esperanzas de cambios para muchos pueblos del mundo es un militar. Lo decía Maquiavelo, pero lo puede pensar cualquiera en la calle, porque no es ningún arcano: “los hombres miran con tibieza siempre las empresas que les presenten dificultades; y [de las ] que no puede esperarse un triunfo fácil atacando a un […] [lider] que tiene bien fortificada su ciudad y no está aborrecido de su pueblo”.

Notas:

* Heinz Dieterich: “(Actualizado) Hugo Chávez, las FARC y el probable fin del antiimperialismo bolivariano” en Aporrea.org [en línea]. 13 jun 2008. Pág.: 1 pantalla. - http://www.aporrea.org/tiburon/a58724.html. - (Consulta: 22 jul 2008).

lunes, 14 de julio de 2008

¿Indio yo, rechazándo lo "superior" europeo?

Imagen tomada de Altercom Probablemente estas palabras sean tildadas de destempladas, expresión de un alma resentida o xenófobas, para irnos a los extremos.  Pero el tema xenófobo, promovido por la Unión Europea, no nos deja otra alternativa que hablar desde un plano sospechosamente xenófobo, por decir menos.   Y es el asunto de la directiva de retorno, a aplicarse en lo sucesivo a los millones de latinos que por allá viven.  Ver lo humillante cómo tratan a los nuestros, cuando nosotros hemos tratado tan bien a los suyos, da coraje y lleva a la imaginación a idear "venganzas" fantasiosas, cuando no a implementar medidas oficiales de contrapeso, como el control de los viajeros de origen europeo en nuestros países y puertos o la negación de nuestro petróleo.

Para consuelo propio, fantasioso, como dije, este autor en varios escritos pasados, mucho antes del asunto de la directiva de retorno, escribió sobre el tema de la transculturación y la condición cipaya de muchos nacionales, concluyendo en varios de sus escritos que una de las razones de semejante comportamiento era la condición amatoria de lo extranjero, cuando no la misma condición casi extranjera, entre otras consideraciones de carácter psico-cultural.  Sin grandes preámbulos, pasó (este autor] a recomendar leyes que impidieran el ejercicio político o de Estado a aquellos señores descendientes de extranjeros en una o dos generaciones.  Razonaba que era difícil que amasen a su país de nacimiento, cuando a cada rato hablaban del deslumbramiento de su país de origen inmigrante y deploraban del pobre patio en donde habían nacido, como en una maldición, por decirlo de algún modo.  Que no se podía amar a la patria chica cuando a cada rato se hablaba de la grande, viajándose para allá a cargar la batería de las nacionalidades y mirando por encima del hombro a los nativos.¹

Me di ese gusto, así, en mi fuero infantil, gusto que nuevamente pongo en el tapete para compartirlo con ustedes, hasta donde lo puedan tolerar.  ¿Qué es harto desagradable e irresponsable hablar del tal modo?  Seguramente, pero mucho me preocupo por no incurrir en actos de ceguera intelectual, cuando a título de la conciencia que esperan de mí, tienen la esperanza de que no diga las cosas como son.  La Unión Europea tiró la primera piedra xenófoba, y ello no lo tapa nadie con ningún manto de los escrúpulos o del decoro.   Ridículo sería que viniera a tratar un tema claro de discriminación con una vista nublada de escrupulosidad.  Es necio, más cuanto aquellos delicados que reclaman y acusan rápidamente de xenofobia a otros, a su vez podría estar incurriendo en un "mental" acto de traición a la patria, por seguir con el cuento de defender lo europeo, a título de amplitud mental, y no lo suyo. Invoco la majadería europea para validar la propia.

"vamos para allá a hacer de obreros y vienen ellos para acá a hacer de terratenientes"

¿Qué mis amigos de origen extranjero?  Los tengo, y muchos.  Pero como dije también en otro escrito por ahí, lo siento por ellos y habrán de comprender que la patria es primero.  Porque la "madre patria" de ellos fue quien tiró la primera piedra, y yo, muy tranquilo en mi país lleno de extranjeros, no albergo culpa alguna; todo lo contrario.  ¿Cuándo carrizos los hemos a ellos tratados de tal manera?   Como sea que hayan llegado a nuestros países, se les trató magníficamente, abriéndoseles las puertas.  Ahora nos corren de por allá, por sudacas, por negros o indios, cuando por aquí anda convertidos en tremendos terratienientes.  Ellos pueden venir a morir a aquí de viejo, si les diera la gana, pero nosotros no podemos ahora ni pasar unas vacaciones por allá a riesgo de que nos metan en una mazmorra.    ¿Está buena esa?

Ello sin contar que tengo un abuelo de la "madre patria", un alemán o italiano cruzado por allá, en el río de la sangre.  Pero afortunadamente −para el punto este de no deberse a nadie a la hora de reclamar−, lejos en el tiempo, difuminado ya en la fuerza de la sangre india que corre por mis venas, la mayor protagonista.  ¿Qué incurro en un acto de etnocentrismo a la inversa?  Por favor, ¡estos ilustrados espíritus europeos!

Como dijera el profesor Vladimir Acosta en un artículo publicado en Aporrea:  vamos para allá a hacer de obreros y vienen ellos para acá a hacer de terratenientes.²  ¿Bonito, no? Más coraje todavía para el tema.  Después lloran cuando desde acá se les quiere responder con no enviarles petróleo, que es de color indio o negro, si vamos al cuento de los colores.  Después lamentan que utilicemos una materia prima como herramienta de presión política, apoyados por los mismos espíritus ilustrados inmigrantes asentados en nuestros países. (¿Dígame los medios de comunicación, en manos de tanto “gringo”?)  Después se quejan que se quiera invocar como ley en su contra eso de que en la guerra vale todo. ¡Ah, sí, pero para ellos joder sí que es bonita cualquier herramienta! Con decir que mi pobre xenobia la colocan como un concepto inferior a la propia.

Sin duda, amo a mis antepasado europeos, que los tengo, como amo la raíz que me proviene de la tierra que piso.   Pero por mi mente no pasa a cada rato que yo provenga de una cultura superior o inferior, viajando hacia los lugares de culto genético a cada rato.  Negro, indio y blanco soy, como raza cósmica, debiéndome a la tierra donde he nacido y crecido.  Al prurito napoleónico o monárquico trasatlántico antepongo la dignidad bolivariana y punto, que es una doctrina de la simbiosis cultural.  ¡Peor para ellos en tierras americanas! Probablemente haya llegado la hora, en contrapartida a las medidas que hoy implementa la vieja Europa, de pedirles cuentas a aquellos que se creen mejores, de preguntarles cuánto hacen por el país donde viven, cuanto de él medran, cuanto le dejan y cuanto se llevan y, si queremos ser un poquito más ridículos, preguntarles, como goza un chiste mexicano, cuanto grado de culpabilidad acumulan en relación al genocidio europeo sobre nuestros indígenas.

Notas:
¹  Véase la "Oposición portátil".  7 abr 2008.  Págs.:  9 pantallas. -  http://zoopolitico.blogspot.com/2008/04/la-oposicin-porttil.html?showComment=1207734600000 y "De los inmigrantes o extranjeros en el ejercicio del poder en América Latina" en Animal político [en línea]. 2 jul 2008. Págs.:  10 pantallas. -  http://zoopolitico.blogspot.com/2008/07/de-los-inmigrantes-o-extranjeros-y-el.html. - (Consulta:  14 jun 2008).
² "Latinoamericanos va a Europa como obreros y europeos en nuestro continente se convierten en terratenientes" en Aporrea.org [en línea].  7 jul 2008.  Págs.:  1 pantalla. - http://www.aporrea.org/tiburon/n116593.html. - (Consulta:  14 jun 2008).

sábado, 12 de julio de 2008

Chávez, un animal político

Imagen tomada de Saque de Esquina A no dudar Hugo Chávez se ha convertido en un habilidoso político de la supervivencia, tomando  "supervivencia" en el sentido positivo de lo que se esfuerza por prevalecer y prosperar, y alejándonos de la semántica que coloca su significado en el plano de las cosas que desaparecen o que ya son marginales.  No es igual afirmar que sobrevive la gacela como especie en virtud de los numerosos ejemplares que hay hoy en día en África a decir que también sobrevive el jaguar aquí en América en virtud de los 2000 ejemplares que apenas quedan todavía.  Uno es un concepto de supervivencia y abundancia, y el otro, de mengua, de uñas que todavía rasguñan el velo de la vida.

El Hugo Chávez habilidoso en supervivencia, cual explorador de montañas políticas, no es ese concepto en fuga de lo que aún queda, lejos de imaginarlo así −a propósito− en esta América Latina de los cambios, con tierra fértil para revoluciones hoy en día; es ese animal político que, aun sabiéndose próspero en su hábitat natural, en el alma popular de las voces americanas, lucha no para no menguar, sino para multiplicarse y no perder vigencia, efectividad, poder de influencia, capacidad de respuesta, arrastre...  Pegada política o punch, en su voz inglesa.

Así lo ha demostrado con sus últimas movidas sobre el tablero, piezas políticas mejor denominadas como "del desconcierto".  No es pequeña la responsabilidad de un líder que encarna la esperanza de un gran sector de los desposeídos de la Tierra y la de los de algún modo viudos ideológicos de la izquierda, derrumbada  en su formato tradicional y doctrinario de hacer política.  Tampoco es pequeño su papel en el concierto de las naciones suramericanas de hoy, siglo XXI, que buscan ensamblarse en un formato de poder mancomunado.  El tamaño del compromiso obliga, no a la concesión de espacios para con el enemigo, como muchos han criticado por allí, sino a la conservación de la preponderancia específica política de "poder hacer".

Y en ese altar no puede escatimarse la quema de los más diversos recursos que apunten al concepto de la supervivencia política progresiva, contante y sonante, como se suele hablar en los mercados, buscándose en lo posible mantener los toques de actualidad y pertinencia.  En modo alguno se habla de hegemonías, un estadio más allá de la pervivencia, porque semejante concepto pertenece a la categoría histórica de lo neoliberal combatido por los espíritus curtidos en las ideas de corte socialista.  Nadie busca evolucionar hacia lo sobradamente conocido como plaga política y económica del mundo.  Contrario a ideas hegemonizantes, se busca más bien un consenso, un contrato más humanista y humanizante, una concordia política entre las naciones que aproveche el suelo político arrasado por las ideologías funestas mercantilistas del siglo XX para construir un futuro de salvación.  En tal sentido, el llamado "socialismo del siglo XXI" funge como el ave fénix de los países asolados por las pestes del neoliberalismo mundial.

Para tan ingente tarea de construir sobre ruinas una nueva geometría de poder político, nada peor que aferrarse a radicalidades, como parecen recomendar los fundamentalistas de la izquierda política, aferrados al viejo modelo en derrota del siglo XX, no tanto en términos ideológicos como sí en los términos prácticos del ejercicio del poder.  Es mutatis mutandi como cualquier especie se perfecciona y sobrevive −que de supervivencia hablamos−, corrigiéndose sobre su marcha histórica.  De otro modo, no aprendiendo del pasado genético o no ejerciendo la memoria histórica, no se puede hablar de una criatura inteligente, de un hombre, o de un animal político, sino de otra especie o cosa.

El fundamentalismo rinde culto a lo disecado y, por extensión, lo  muerto.  La flexibilización, sobre la base de un eje fundamental, que eche mano del espectro de las argucias políticas al alcance a objeto de prevalecer, sostenidamente, es una actitud más cónsona con la naturaleza inteligente de ese bípedo erecto que se desplaza sobre la corteza terrestre.  Aquí nadie propone vender ni conceder nada.  Se trata de no repetir la lamentable historia del "fin de las ideologías", de traumático recuerdo para muchos.  Un Chávez muerto, sitiado o bloqueado, no le rinde servicios a nadie, siendo, para peor, lo que aspira el enemigo.  Para poder seguir rindiéndole frutos a la revolución de los pueblos en el mundo se precisa estar vivo, política y hasta biológicamente.  Este caminar sólo pide cerebro y que no se pierda el alma en sus pasos.

¿O es que acaso el arte de la política, en su gran extensión discursiva o dialéctica, contante y cultivante de un gran bagaje cognitivo sobre aspectos humanos, y en su dimensión técnica de conservación del poder,  es una disciplina exclusivamente abierta a plenitud a los políticos de la derecha?  ¿No puede un político de la izquierda, por aquello de la religión doctrinaria, echar mano de recursos que aplicados sobre la psique colectiva le asegure un crédito político, aclarándose siempre que no traicione el contenido de la idea como sí explote la posibilidad flexible de la forma?  ¿No puede un político de la izquierda aventurar una frase ambigua de gran poder político  que le permita, por ejemplo, ganar tiempo ante determinada coyuntura en su país porque dentro de las filas de la religión partidista los cancerberos ideológicos se "ponen bravos"? 

No se puede así, limitadamente, ejercer la política tradicional, siéndose de una izquierda delicada pero moviéndose sobre el plano paradigmático establecido por la derecha política, bastante hosco por cierto.  No de otro modo se puede combatir a plenitud al enemigo político, que no escatima argumentos de propio cuño para el ataque:   con sus propias herramientas y discursos.  ¿No es Hugo Chávez, por ventura, resultado de una lucha política establecida contra la derecha artera tradicional, en cuya escenificación utilizó los formatos y dialéctica política propios del sistema para vencer?  ¿No ganó Chávez su estatus a punta de elecciones, siguiendo el esquema ese del fementido discurso político contemporáneo que las privilegia como la esencia "democrática" de las sociedades civilizadas del mundo?  Si vamos al caso, la "democracia" en el mundo occidental es una farsa, donde el concepto "pueblo" es una idea que supuestamente está representada por sus líderes elegidos; contra ello, en primer término, un alma castiza y religiosa tendría que estar en desacuerdo, con todo lo que ello tenga de invitación para tomar el poder por otras vías.

Pero no, el presidente venezolano se sometió al formato, como el viejo Allende, siendo en tal sentido su descendiente político, aunque más favorecido precisamente por conocer la historia del pionero.   Vencedores de enemigos con sus propias armas y recursos, como dios manda para prevalecerr en la guerra.  Sabedor del inevitable contraataque de la derecha política, a diferencia de Allende, Hugo Chávez apertrechó ideológicamente a su pueblo para el combate y la resistencia.  Lo dotó de un arma ideológica. Tal es una verdad de aquí a Pekín, como se dice, que lanza al intelecto a preguntarle a los radicales viudos del siglo XX lo siguiente:  ¿es que acaso queremos repetir la historia del Chile de Allende, con su emblema de inmolación y rigidez política?   En este sentido Chile no es diferente a Venezuela:  ello es lo que busca el enemigo, y recibe ayuda desde adentro, desde las filas mismas de la revolución.

Si de lo que se trata es de enclavar un nuevo modo de pensar y vivir, a saber, bajo el humanista esquema del socialismo −por mencionar la punta−, no se puede perder de vista que el contexto actual de las naciones se ubica en el plano ideológico y cultural propio del enemigo a vencer, debiéndose por fuerza sujetarse a la convención.  No hay otra vuelta; las armas "jamás vistas" del futuro esplendoroso habrán de llegar vía al trabajo de una educación progresiva sobre las masas.  Los paradigmas, los estigmas, difícilmente cambian repentinamente con métodos de fuerza o con inmaduras utilerías utópicas.  La historia está allí con sus emblemas para quien quiera beberla.

Por ello no puede extrañar ni puede ser reprensible que el jefe de Estado venezolano eche mano de los recursos técnicos que le brinda el arte político para sobreponerse a eventualidades adversas, sin que necesariamente abandone la matriz ideológica que lo alumbró.  Como todo político en el aspecto formal y en aras del combate o la supervivencia política, tiene derecho al recurso del impacto, de la confusión, de la ambigüedad, de la sorpresa o de lo que sea que apuntale su posición señera en el entramado político coyuntural que aspira a un "nuevo orden" para la América Latina, orden no tan nuevo por lo que tiene de bolivariano e integracionista en su gesta.  ¿O no lo tiene, debiendo fenecer como el soñador idealizado de idealizados mundos, entregándole el completo bastón de mando a quienes no tienen reparos en asumir la política como un campo de combate de la "tecnología" de las masas?

Y ya lo vimos desde el capítulo estremecedor del 2D de 2007, cuando la derrota de la Reforma Constitucional.  El Hugo Chávez que se erigió como nuevo en la lid política no vino a cuento porque en algún momento cediera en sus presupuestos ideológicos, sino porque empezara a echar mano de artilugios desconcertantes para el enemigo en el plano de las estrategias políticas, el primero de ellos el manso y civil reconocimiento de la derrota reformista, hecho que, como se vio, para nada pareció tener semejante carga peyorativa, dado que desargumentó la matriz de opinión que propalaba a nivel mundial que Hugo Chávez era un tirano en Venezuela.  Y, como ya se sabe, los tiranos no aceptan ni derrotas ni reconocen resultados electorales.

Semejante fase del desconcierto, magnífica desde su accidental inicio, dio pie con bola en el sucesivo acaecer político del país, cultivando sonados triunfos en aspectos internos que incorporan a la oposición, como la retroacción del famoso currículo educativo, la cuestionada Ley del Sistema Nacional de Inteligencia y Contrainteligencia, y la reunión con los empresarios (junio 2.008), a quienes urgió unirse en una "gran alianza nacional productiva", naturalmente, aclarándoles antes que la "vía venezolana es por el socialismo", pero bajando el tono de la radicalidad, conversando, manteniéndose políticamente a flote, desconcertando, sin abandonar el discurso contra el libre mercado, tratando de sumar alguna voluntad allí donde palpita el corazón del oposicionismo venezolano.

Por supuesto, como ocurrió con el 2D, el efecto político fue paralizante, a más de desconcertante.  El Chávez político levantó reacciones encendidas hasta dentro de las filas propias, teniendo un efecto desarticulador sobre la oposición venezolana, más específicamente desargumentador.  El capítulo de currículo educativo y la mencionada ley dejaron frías en las calles las marchas y protestas proyectadas para sumir en el caos a la ciudadanía venezolana.  El asunto con el empresariado suscitó el encono y la incomprensión de algunos sectores laborales, quienes conceptualizan al patronazgo como enemigo.   "Al enemigo ni agua", fue el lema enarbolado para formularle su desacuerdo, críticas que en modo alguno conciben que se pueda conversar con el factor adverso, mucho menos creerse eso de que pueda albergar una conciencia socialista, como es la invitación del presidente.  El agua y el aceite no comulgan, según conceptualización tradicional.

Pero el punto maestro de la nueva faceta chavista, replicada sobre la experiencia del éxito interno, ha sido su implementación en el plano de la política internacional, concretamente en lo que atañe a la relación con Colombia.  Fue fulminante para el mundo político opositor, cuyas campañas de satanización mediática se basan en la racionalidad ideológica, oír de labios de Chávez que probablemente la lucha armada de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) sea un hecho obsoleto.  No digamos nada de la actual reunión del mandatario con el presidente colombiano, Álvaro Uribe, cuya presencia es protestada en Venezuela por sectores de la sociedad civil.  Sencillamente pasmante, con efecto desarticulador en las políticas de ataque opositor.  ¿No es, pues, Chávez el tirano al que hay que atacar por andar prometiéndole el infierno comunista a los latinoamericanos?

Y mientras el mundo opositor se recupera del desdibujamiento de la imagen con que alimentan sus ataques, y mientras reagrupan sus nuevos cañones de ataque hacia lo que imaginan es el real talón de Aquiles chavista, el hábil político gana el tiempo requerido para el examen de sus fuerzas y la concepción de flamantes y poderosos artilugios de combate político a futuro.  Nadie puede negar que el presidente venezolano haya logrado desmontar con su maña el argumento mediático de que es un coadyuvante terrorista y amparador del narcotráfico, en momentos en que los EEUU activa la IV Flota de la Armada y la pone a circular alrededor del continente.  Todo el empuje argumental del enemigo, con amenazas de guerras entre hermanos, sino de inminencias intervencionistas, de pronto se ve tirado por los suelos, situación a la que no se habría arribado jamás −por cierto− de persistirse en el empeño severo que recomiendan los radicales de siempre.

Que el enemigo se desconcierte por obra y arte del maquinar político, y en el intervalo del pestañeo se opte por huir o atacar, no merece encarnar ninguna crítica política, más si quién acomete la acción no ha dado pruebas fehacientes de ninguna traición o reblandecimiento fundamental.  No es patrimonio particular de ciertas tendencias políticas aprovecharse permisivamente del humano legado de la ciencia y el arte.  Todo lo contrario, el conocimiento del hombre, la psicología de las masas, el arte político, es un patrimonio universal presente en la despensa de cualquier mortal, para la batalla dialéctica, para la reflexión, para quien, en apoderamiento de él, procure avanzar sus propuestas.

Que el obrar chavista como técnica política confunda, sorprenda, gane tiempo, reagrupe o suavice asperezas, sin que la propuesta bolivariana pierda su perspectiva integracionista y socializante, incluso en circunstancias de arremetida internacional, tiene todos los visos de una bendición del cielo, en vez de ser un motivo de preocupación en boca y pluma de los cancerberos ideológicos de antaño y siempre, prestos para la recomendación de rígidas recetas de la derrota, según experiencias históricas.  Comprender que la tríada hombre-ideología-y-tiempo constituye un sencillo insight de aplicación fundamental, probablemente no entre dentro de los duros cálculos de su intelectualidad ideológica. Para ellos, va el saludo de los tiempos que pasan…, con todo el respeto que merecen las mentalidades que honestamente sostienen sus puntos de vistas.